Subcomandante insurgente Marcos

Nuestra ley hizo florecer libros, medicinas, risas, dulces y juguetes. La ley de ellos, la de los poderosos, vino sin argumento alguno que no fuera el de la fuerza, y destruyó bibliotecas, clínicas y hospitales, trajo tristeza y amargo caminar a nuestra gente. Y nosotros pensamos que una legalidad que destruye el conocimiento, la salud y la alegría, es una legalidad muy pequeña para hombres y mujeres tan grandes, y que nuestra ley es mejor, infinitamente mejor, que la ley de esos señores que, con vocación extranjera, dicen que nos gobiernan.

lunes, 8 de diciembre de 2008

Los Camaleones Invaden Las Catedrales de Pedro Shimose

Los camaleones Invaden las catedrales
Conciben la vida como una partida de ajedrez.
La existencia es un cálculo. No duermen; no aman.
Nacieron con el corazón manchado, sin luz en la mirada,
y viven al acecho, welcome mister, congratulations!
y viven acosados por el color de las circunstancias.
Les sobra astucia, saben elegir el momento oportuno,
las palabras adecuadas, el tono conveniente, el ademán preciso,
halagan, mienten, se desprecian, estudian, aparentan,
buscan el fulgor de las cámaras, la estridencia,
flash sonríe flash posa flash
Resplandor efímero okey! trepan peldaños, se van por las ramas,
buscan las lentejuelas de la fama, leen informes reservados, sonríen, visten a la moda,
buscan sus nombres en las crónicas sociales,
corren, husmean el aire, por las dádivas trotan,
escriben en los diarios, avanzan, retroceden, sonríen,
son discretos,
Solicitan audiencias, dan consejos, afinan la puntería,
disparan, van a misa, son como los gatos, saludan, dan la mano,
siempre caen de pie, aclaran la voz, ejem, la impostan, la modulan,
piensan dos, cien, mil veces, no duermen, como los búhos, piensan,
viven agazapados en el color, en catedrales sombrías y vacías.
A su paso se abren las grandes puertas de la nada.

poemas josé agustín goytisolo / español

asterisco: gracias quijoteurbano porque sin saberlo me robo siempre sus lunes...
EL AIRE HUELE A HUMO

¿Qué hará con la memoria
de esta noche tan clara
cuando todo termine?
¿Qué hacer si cae la sed
sabiendo que está lejos
la fuente en que bebía?

¿Qué hará de este deseo
de terminar mil veces
por volver a encontrarle?

¿Qué hacer cuando un mal aire
de tristeza la envuelva
igual que un maleficio?

¿Qué hará bajo el otoño
si el aire huele a humo
y a pólvora y a besos?

¿Qué hacer?¿Qué hará? Preguntas
a un azar que ya tiene
las suertes repartidas.



EL OFICIO DEL POETA

Contemplar las palabras
sobre el papel escritas,
medirlas, sopesar
su cuerpo en el conjunto
del poema, y después,
igual que un artesano,
separarse a mirar
cómo la luz emerge
de la sutil textura.

Así es el viejo oficio
del poeta, que comienza
en la idea, en el soplo
sobre el polvo infinito
de la memoria, sobre
la experiencia vivida,
la historia, los deseos,
las pasiones del hombre.

La materia del canto
nos lo ha ofrecido el pueblo
con su voz. Devolvamos
las palabras reunidas
a su auténtico dueño.



HISTORIA CONOCIDA

Es una historia conocida, amigos,
todos la recordamos,
—viento del pueblo se perdió en el pueblo—
pero no ha terminado.

Hace tiempo hubo un hombre entre nosotros,
alegre, iluminado,
que amó y vivió, cantaba hasta en la muerte,
libre como los pájaros.

¡Qué bonito sería! Nace, escribe,
muere desamparado.
Se estudian sus poemas, se le cita,
y a otra cosa, muchachos.

Pero su nombre continúa, sigue,
como nosotros, esperando
el día en que este asunto, y otros muchos,
se den por terminado.

¡Qué bonito sería! Nace, escribe,
muere desamparado.

Así pasan los años / Lauren Mendinueta (Colombia)

Pasan los años,
y aunque la vida me acusa de inmovilidad,
también yo he viajado.
Como una partícula de polvo
he revoloteado por la casa y me he prendido a los libros.
Como un insecto he reposado a la orilla de las acequias,
o simplemente he sido una mujer que de tarde en tarde
ha mirado hacia el mar
buscando barcos olvidados por la neblina
y que vuelven a la memoria,
sin esperanza distinta de la muerte.

Antoine de Saint-Exupery

Si quieres construir un barco, no reunas a la gente para recoger madera ni le asignes tareas y trabajo, más bien, enséñales a anhelar la eterna inmensidad del mar...

Oración de los bostezadores/ Luis Vidales (Colombia)

Señor.
Estamos cansados de tus días
y tus noches.
Tu luz es demasiado barata
y se va con lamentable frecuencia.
Los mundos nocturnales
producen un pésimo alumbrado
y en nuestros pueblos
nos hemos visto precisados a sembrarle a la noche
un cosmos de globitas eléctricas.
Señor.
Nos aburren tus auroras
y nos tienen fastidiados
tus escandalosos crepúsculos.
¿Por qué un mismo espectáculo todos los días
desde que le diste cuerda al mundo?
Señor.
Deja que ahora
el mundo gire al revés
para que las tardes sean por la mañana
y las mañanas sean por la tarde.
O por lo menos
– Señor –
si no puedes complacernos
entonces
– Señor –
te suplicamos todos los bostezadores
que transfieras tus crepúsculos
para las 12 del día.
Amén.

martes, 2 de diciembre de 2008

La certeza, Roque Dalton


Después de cuatro horas de tortura, el apache y los otros dos cuilios le echaron un balde de agua al reo para despertarlo y le dijeron: "manda a decir el coronel que te va a dar un chance de salvar tu vida. Si adivinas quién de nosotros tiene un ojo de vidrio, te dejaremos de torturar". Después de pasear su mirada sobre los rostros de sus verdugos el reo señaló a uno de ellos: "el suyo, su ojo derecho es de vidrio." Y los cuilios asombrados dijeron: "¡Te salvaste! Pero ¿cómo has podido adivinarlo? todos antes fallaron, porque el ojo es americano, es decir, perfecto" "Muy sencillo -dijo el reo- sintiendo que le venía otra vez el desmayo- fue el único ojo que no me miro con odio"

Desde luego, lo siguieron torturando.

Patria es humanidad/ mario benedetti

La manzana es un manzano
y el manzano es un vitral
el vitral es un ensueño
y el ensueño un ojalá
ojalá siembra futuro
y el futuro es un imán
el imán es una patria
patria es humanidad

el dolor es un ensayo
de la muerte que vendrá
y la muerte es el motivo
de nacer y continuar
y nacer es un atajo
que conduce hasta el azar
los azares son mi patria
patria es humanidad

mi memoria son tus ojos
y tus ojos son mi paz
mi paz es la de los otros
y no se si la querrán
esos otros y nosotros
y los otros muchos más
todos somos una patria
patria es humanidad

una mesa es una casa
y la casa un ventanal
las ventanas tienen nubes
pero sólo en el cristal
el cristal empaña el cielo
cuando el cielo es de verdad
la verdad es una patria
patria es humanidad

yo con mis manos de hueso
vos con tu vientre de pan
yo con mi germen de gloria
vos con tu tierra feraz
vos con tus pechos boreales
yo con mi caricia austral
inventamos una patria
patria es humanidad
asterisco: agradezco a onelio pérez quien corrigió el autor de este poema.. la frase patria es humanidad corresponde a josé martí, pero el poema a benedetti! gracias mil!!!

a las 13 Rosas / alberto montoya... mi duende

esta noche el recuerdo se puso a recordar,
una tormenta iluminó la mar frente a mi casa
y la madrugada de frío caminó hacia mis dedos
trayéndome versos necesarios,urgentes.

Pero antes quiero que conozcan una historia
que el cine ha llevado a los ojos de la gente,
es la historia de las trece rosas,la de los
represaliados y asesinados por Franco.


(Copiado de wikipedia)
Tras la ocupación de Madrid por el ejército franquistas y el fin de la guerra, las Juventudes
Socialistas Unificadas intentaron reorganizarse clandestinamente bajo la dirección de José Pena Brea, de 21 años. Tras el golpe de Estado del coronel Casado y el fin de la guerra, los dirigentes del PCE y las JSU habían abandonado España, dejando la organización en manos de militantes poco significados, los cuales, esperaban, podrían pasar más desapercibidos. José Pena, secretario general del comité provincial de las JSU, fue detenido por una delación, y obligado mediante torturas a dar todos los nombres que sabía y firmar una declaración preparada.
Roberto Conesa, policía infiltrado en la organización, colaboró también en la caída de la organización (Conesa fue posteriormente comisario de la Brigada Político-Social franquista y ocupó un cargo importante en la policía durante los primeros años de la democracia). La práctica totalidad de la organización clandestina cayó de este modo, sin apenas posibilidad de reorganización. La mayor parte de los detenidos aún no había tenido tiempo de integrarse en la organización clandestina o apenas acababan de hacerlo. A la captura de los militantes ayudó el hecho de que los ficheros de militantes del PCE y las JSU no habían podido ser destruidos, debido al golpe de Estado del coronel Casado, y fueron requisados por los militares franquistas al ocupar Madrid. Entre los detenidos se hallaban las Trece Rosas, que fueron arrestadas y conducidas a instalaciones policiales, donde fueron torturadas, y después a la cárcel de mujeres de Ventas, una cárcel construida para 450 personas en la que se hacinaban 4.000.
El 29 de julio, Isaac Gabaldón, comandante de la Guardia Civil, inspector de policía militar de la 1ª Región Militar y encargado del "Archivo de Masonería y Comunismo" (archivo que agrupaba los documentos recopilados por el ejército de Franco en su avance durante la guerra), su hija de 18 años y su chófer fueron asesinados en Talavera de la Reina, en un oscuro incidente del que fueron acusados tres militantes de las JSU. Como represalia, 56 jóvenes de las JSU encarcelados (en su mayor parte antes del asesinato), 43 hombres y 13 mujeres, conocidas como las Trece Rosas, fueron llevados a juicio ante un Tribunal Militar el 3 de agosto (expediente 30.426), acusados de reorganizar las JSU y el PCE para cometer actos delictivos contra el "orden social y jurídico de la nueva España", y condenados, por "adhesión a la rebelión", a pena de muerte. En la madrugada del 5 de agosto de 1939, junto a la tapia del cementerio de la Almudena de Madrid, a 500 metros de la prisión de Las Ventas, fueron fusilados los 56 miembros de las Juventudes Socialistas Unificadas, entre los que se encontraban las Trece Rosas.

Las Trece Rosas
Carmen Barrero Aguero (20 años, modista). Trabajaba desde los 12 años, tras la muerte de su padre, para ayudar a mantener a su familia, que contaba con 8 hermanos más, 4 menores que ella. Militante del PCE, tras la guerra, fue la responsable femenina del partido en Madrid. Fue detenida el 16 de mayo de 1939.
Martina Barroso García (24 años, modista). Al acabar la guerra empezó a participar en la organización de las JSU de Chamartín. Iba a la Ciudad Universitaria a buscar armas y municiones (lo que estaba prohibido). Se conservan algunas de las cartas originales que escribió a su novio y a su familia desde la prisión.
Blanca Brisac Vázquez (29 años, pianista). La mayor de las trece. Tenía un hijo. No tenía ninguna militancia política. Era católica y votante de las derechas. Fue detenida por relacionarse con un músico perteneciente al Partido Comunista. Escribió una carta a su hijo la madrugada del 5 de agosto de 1939, que le fue entregada por su familia (todos de derechas) 16 años después. La carta aun se conserva.
Pilar Bueno Ibáñez (27 años, modista). Al iniciarse la guerra se afilió al PCE y trabajó como voluntaria en las casas-cuna (donde se recogía a huérfanos y a hijos de milicianos que iban al frente). Fue nombrada secretaria de organización de Radio Norte. Al acabar la guerra se encargó de la reorganización del PCE en ocho sectores de Madrid. Fue detenida el 16 de mayo de 1939.
Julia Conesa Conesa (19 años, modista). Nacida en Oviedo. Vivía en Madrid con su madre y sus dos hermanas. Una de ellas murió de pena (por la muerte de su novio en las guerrillas) estando ella detenida. Se afilió a las JSU por las instalaciones deportivas que presentaban a finales de 1937 donde se ocupó de la monitorización de estas. Pronto se empleó como cobradora de tranvías, ya que su familia necesitaba dinero, y dejó el contacto con las JSU. Fue detenida en mayo de 1939 siendo denunciada por un compañero de su "novio". La detuvieron cosiendo en su casa.
Adelina García Casillas (19 años). Militante de las JSU. Hija de un guardia civil viudo. Le mandaron una carta a su casa afirmando que sólo querían hacerle un interrogatorio rutinario. Se presentó de manera voluntaria, pero no regresó a su casa. Ingresó en prisión el 18 de mayo de 1939.
Elena Gil Olaya (20 años). Ingresó en las JSU en 1937. Al acabar la guerra comenzó a trabajar en el grupo de Chamartín.
Virtudes González García (18 años, modista). Amiga de María del Carmen Cuesta (15 años, perteneciente a las JSU y superviviente de la prisión de Ventas). En 1936 se afilió a las JSU, donde conoció a Vicente Ollero, que terminó siendo su novio. Fue detenida el 16 de mayo de 1939 denunciada por un compañero suyo bajo tortura.
Ana López Gallego (21 años, modista). Militante de las JSU. Fue secretaria de Radio Chamartín durante la Guerra. Su novio, que también era comunista, le propuso irse a Francia, pero ella decidió quedarse con sus tres hermanos menores en Madrid. Fue detenida el 16 de mayo, pero no fue llevada a la cárcel de Ventas hasta el 6 de junio. Se cuenta que no murió en la primera descarga y que preguntó "¿Es que a mi no me matan?".
Joaquina López Laffite (23 años). En septiembre de 1936 se afilió a las JSU. Se le encomendó la secretaría femenina del Comité Provincial clandestino. Fue denunciada por Severino Rodríguez (número dos en las Juventudes Socialistas). La detuvieron el 18 de abril de 1939 en su casa, junto a sus hermanos. La llevaron a un chalet. La acusaron de ser comunista, pero ignoraban el cargo que ostentaba. Joaquina reconoció su militancia durante la guerra, pero no la actual. No fue conducida a Ventas hasta el 3 de junio, a pesar de ser de las primeras detenidas.
Dionisia Manzanero Salas (20 años, modista). Se afilió al Partido Comunista en abril de 1938 después de que un obús matara a su hermana y a unos chicos que jugaban en un descampado. Al acabar la guerra fue el enlace entre los dirigentes comunistas en Madrid. Fue detenida el 16 de mayo de 1939.
Victoria Muñoz García (18 años). Se afilió con 15 años a las JSU. Pertenecía al grupo de Chamartín. Era la hermana de Gregorio Muñoz, responsable militar del grupo del Sector de Chamartin de la Rosa. Llegó a Ventas el 6 de junio de 1939.
Luisa Rodriguez de la Fuente (18 años, sastra). Entró en las JSU en 1937 sin ocupar ningún cargo. Le propusieron crear un grupo, pero no había convencido aun a nadie más que a su primo cuando la detuvieron. Reconoció su militancia durante la guerra, pero no la actual. En abril la trasladaron a Ventas, siendo la primera de las Trece Rosas en entrar en la prisión.



Monumento a las Trece Rosas en el cementerio de la Almudena en Madrid



A las 13 Rosas
A los represaliados y víctimas
de la dictadura franquista.


En este mar furioso pongo mi alma,
que no quiero que esté quieta,
que no quiero que quede dormida,
inerte,bajo olvido de aguas calmas,
en este mar valiente y bravo pongo mi esperanza.

Madre,que ya vuelvo,pero las niñas no regresan,
madre,es solo un momento y ya tardan,
madre,¿qué son estos fusiles de oscuridad rojigualda?,
madre, si muero,violetas,llévame violetas...
las mataron,mataron a la inocencia.

Se enamoró un jazmín de un rosal enlutado,
jóvenes tallos de brazos abiertos al cielo
se abrazan desesperados,Agosto tiembla,
racimos de trece rosas crecen en los muros
ensangrentados del cementerio de la Almudena.

Madre,las mataron asesinos de lunas,
Madrid de duelo,España desangrada,
que sus nombres no se borren de la historia,
así que pasen cien siglos de silencio,
que golondrinas y ruiseñores los lleven en vuelo.

Obraron sin piedad,un país enjaulado en el odio,
vencieron y en el nombre de Dios siguieron matando
Badajoz,Almería,Málaga,Granada,su Granada...
Machado murió de frío y de pena en tierras de Francia,
la memoria es un jinete que galopa por España.

En esta mar furiosa pongo mi alma,
que no quiero que quede dormida,
que no quiero que quede quieta,
que se abran las entrañas de esta tierra,
en esta mar valiente y brava pongo mi esperanza.




Aguadulce a 26 de Noviembre de 2008

Alberto MOntoya Alonso

Al otro lado de las montañas / alvaro cunqueiro



" Alguien dijo que había ciudades para soñar
al otro lado de las montañas.
No dijo si estaban suspendidas en el aire,
sumergidas en las lagunas,
o perdidas en el corazón del bosque.
Los que allá fueron nada encontraron,
ni altas torres ni jardines
ni mujeres hilando en el atrio,
ni un muchacho aprendiendo a tocar la gaita.
Solo yo traje algo para seguir soñando
algo visto y no visto en la niebla de la mañana,
algo que era una flor o un mirlo de oro
o un pie descalzo de mujer,
un sueño de otro que se ponía a dormir en mi,
echado en mis ojos,
pidiéndome que lo soñase mas allá de las montañas,
donde no hay ciudades para soñar.
Y ahora mi oficio es soñar, y no se
si soy yo quien sueño, o es que por mi sueñan
campos, miradas azules, palomas que juegan con un niño,
o una mano pequeña y fría que me acaricia el corazón. "

Soneto selenita

(a cheqa...)


Una mujer me ha reclamado
un par de versos a Selene
si olvido a olivo ha trocado
¿qué culpa el corrector tiene?

Se me acusa injustamente
de andar frío, matemático
y en tal avatar sintáctico
trato de ser suficiente

Por no dejar derretidos
a los que ¡pobres! me leen
mejor me llevo mi boca

Y los dejo en el olvido
para ver a quién le toca
decirme qué es lo que creen.

Eduardo Parra Istúriz
24/11/08
asterisco: este soneto nació a partir de que le dije a un amigo -entre otras locuras poeta- que estaba muy irónico ese día...

Diego Dimacan Calvopiña Andrade


Dimacan nace en el ombligo de la tierra, el punto más cercano al sol. Desde los albores demuestra cualidades literarias interesantes, dentro de la poesía y el periodismo. Integrante del taller literario "Sacapuntas" en primera instancia articulista de diarios riobambeños, él, es convincente al manifestar que todo ser humano es naturalmente poeta por soñar durante el estado de vigilia y por crear vida con la luz del sol.

. . . Dimacan es el gitano del edén, sus huellas han sido fructíferas, cada texto interminable.




TU PRIMERA VEZ
SE LLEVÓ
MI ÚLTIMA GOTA DE HOMBRÍA

ME VOLVISTE
VITAL
SIN TIEMPO
MAS LIBRE QUE EL DESEO
MENOS ESCLAVO QUE LA PROVIDENCIA

SIN MAS NI MAS
TE QUEDASTE

A HOJEAR MIS DÍAS CON TUS GUIÑOS
A LLENAR MI AGENDA
CON TU BOLÍGRAFO

SIN DARTE CUENTA
PERDISTE EL BOLETO DE VUELTA

Y CUANDO QUISISTE RETORNAR

ME LLEVASTE CONTIGO HACIA EL MAÑANA
ME GUARDASTE EN TU DIARIO

TE QUEDASTE CON EL CAMBIO
DE MI PRIMERA VEZ

TE QUEDASTE
CONMIGO ...

los hipócritas / koldo

Los hipócritas no tienen rostro, apenas la sonrisa
maquillada

con que sumarse al carnaval y simular una apariencia
humana.

Los hipócritas no tienen palabras, únicamente
registros y pretextos con que acallar conciencias y
maquinar coartadas.

Los hipócritas no tienen amigos, como mucho otros
socios de embozos y artificios.

Los hipócritas no tienen sueños, quizás la pesadilla
del espejo

cuando el tiempo se cobre los olvidos.

Los hipócritas no tienen amor, sólo miedo a conocerse
y a que los descubran.

Los hipócritas, que se dicen cristianos, no tienen
Dios, les basta darse golpes en el pecho, invocando su
nombre, en el temor de que alguna vez los oiga.

Los hipócritas no tienen pasado, se conforman con
negar las evidencias y esconder sus páginas en blanco.

Lo único que, en una sociedad como la nuestra tienen
los hipócritas es... futuro.

Pero eso sí, un futuro sin rostro, sin palabras, sin
amigos, sin sueños, sin amor, sin Dios, sin pasado...
sin futuro.

complicidades / koldo

Si a usted le mienten a las siete de la mañana y a las
ocho y a las nueve y a las cinco de la tarde y a las
diez de la noche y de madrugada.

Si a usted le mienten el lunes y el miércoles y el
sábado y el domingo.

Si a usted le mienten de frente y de espaldas, en
color y en blanco y negro, de perfil y entre líneas.

Si a usted le mienten en inglés y en español, por
señas, con premeditación y alevosía.

Si a usted le mienten de uno en uno y en cadena, en
directo y en diferido.

Si a usted le mienten en todas las medidas y le
cuentan mentiras "extra-largue" y mentiras "medium" y
mentiras "smoll", mentiras de diez libras y de veinte,
mentiras al detalle y mentiras al contado.

Si a usted le mienten en "do" y en "fa" y en
"mi-sol-la" y en "do-re-mi".

Si a usted le mienten al derecho y al revés,
discretamente y a la franca, de memoria y de corrido.

Si a usted le mienten en la cama y le mienten también
en la cocina y en el patio, a los postres y en la
sobremesa, con y sin preservativo.

Si a usted le mienten previa cita y de improviso, al
paso, a la carrera, a la buena de Dios y a la mala
también.

Si a usted le mienten en serio y de relajo, con filtro
y sin filtro, de blanco y de morado.

Si a usted le mienten en casa y en la calle, así venga
saliendo o vaya entrando.

Si a usted le mienten de la mano y del brazo, a pasito
lento y a pasito largo.

Si a usted le mienten por arriba y por abajo, con fina
discreción de gato y con grosera devoción de perro.

Si a usted le mienten todos y le engañan tanto...usted
no es un ingenuo.

Usted es un cómplice.

EL DESVELO Y LAS NOTICIAS / jorge enrique adoum

me identifico...me reconozco...me siento....me soy este poema...


EL DESVELO Y LAS NOTICIAS
En mitad de la noche despierto
y me levanto como para vestirme,
como para llorar o para ver si duermes
lateral y desnuda.
Pero es cierto:
ya no tengo tu voz saliendo
debajo de mi boca, ya no tropiezo
con tus tristes zapatos las mañanas,
ya sólo yo, yo solamente y solitario
en los almuerzos y en el hambre,
visitante extranjero de costumbres
que se me habían ido como una
edad, yo nuevamente familiar y ajeno.
Pequeña lastimada, tú
desempleada, tú compañera,
todo el día en los climas de la ira:
en cada sábana me hiere todavía
tu cadera, y me duelen
él, ellos, los compañeros
buscados, los espesos escondidos,
los cadáveres compañeros. Cómo
no iban a dolerme si hay tanta
agua entre los dos, tantas distancias
que no puedo sobornar, pasaportes,
gobiernos que nos odian, y sobre todo
esta pobreza guardiana,
portera, tutelar.
Cuando en la lluvia, cuando
en mi taza de café me quedo,
cuando en mi ropa, y el sueño
a ti sola te circunda,
y no sé nada de ti, como
si nunca hubiérate esperado
en una esquina o una cama,
y me preguntara "¿qué sabes
de tu compañera?", callo,
pienso en velorios, en trenes
que no paran hasta el norte,
ya me parece sombras, ya
me parece lloro, ya cuchillos
en los que Pepe, Antonio, Angélica
o Elías o cualquier hermano
me escribiera: "Tu compañera
fue herida ayer. Tu compañera
fue asesinada el lunes. Fue desterrada
al sur tu compañera, a las islas
que el mar rechaza de la costa.
No está tu compañera".
¿No está mi compañera? ¿Y todo
porque tenía la costumbre
de vivir, porque acostumbra
defenderles el vientre a las mujeres,
los huesos a los trabajadores
y a los niños sus tinteros?
Todo porque vas, madrugada
a madrugada, a las paredes
de la ciudad, dejando allí
tu porción de patria y voluntad,
tu nombre fácil, tu nombre
Rojas, hasta abajo
del pueblo.
Y entonces pregunto
a nadie por ti, ni a ti,
ni al corazón con su ronca
campana intermitente. Pero odio
de nuevo, y otra vez amo mi odio
adherido, como una araña húmeda,
a la pared del alma: ya no por sucias
mariposas mi temblor y mi asco:
es por los escuadrones, por la aritmética
de su formación para el destrozo;
ya no a las hinchadas cucarachas
alineadas mi puntapié de náufrago:
pero a la dentadura policía,
pero el próximo cadáver, necesario,
presidencial, agrietado, escogido
entre sus desventurados almirantes.
Y te espero.
En estos meses largos,
del 1.º al 30, y aun más, al 31,
cada tarde busco tu carta
que no llega, como el sueño
a veces, busco trabajo, busco
una pieza, miro el mar
con su pobre vecindario de alas
y de mástiles, pregunto
cuánto cuestan las cosas
que nos faltan: una hamaca,
diez minutos sin zozobra,
un plato nada más y dos cucharas,
y esa venganza que me golpea adentro
como te golpearía el hijo a estas horas.
En mi cama suelo pensar: yo reconozco
que es vegetal tu resistencia, y tu destreza
para entrar en mí, definitivamente,
como en tu dormitorio.
Pero de pronto,
otra vez tengo miedo y me levanto,
y otra vez el odio gotea al esqueleto
su ácido común, recibo a tientas
la noticia, indago por tu cuerpo
que antes estaba dentro de tu nombre.
Y no está, como Joaquín (sólo sus botas
debajo de su cama, sólo su saco
esperándolo cuatro meses en la puerta).
Como él, sigues siendo una noticia
no confirmada aún por el encuentro,
y la esperada, ah separada,
ah la que templó mi verso
y mi cerveza, la que alabé en mi canto
de esponsal y de vieja batalla comenzada.

las vidas comunicantes / JORGE ENRIQUE ADOUM / ecuatoriano

fue a trabajar con sabor a malanoche
el jefe lo trató como a comunista y negro
se comió un sandwich de jamón flaquísimo
volvió a la oficina cárcel o perrera
hablabló de qué para qué con quiénes
escribió las mismas cartas de ayer para algún día
fue al banco a mendigar un saco dos meses medicinas
lo maltrataron en los transportes públicos
y avanzó a pie bajo la lluvia espesa
pero ella lo llamó en la noche y le leyó lo escrito
"fue al trabajo maltrabajado por la malanoche
recibió en la cara jazos de su jefe
se comió un sandwich de huecos y vacío
volvió buey involuntario al materreses
habló de todo y nada con uno y con ninguno
escribió cartas de otro para otros otros
en el banco lo trataron como al tercer mundo
en los transportes públicos nadie habla con alguien
cruzó esta noche la vida bajo la lluvia llena
y preparó la fiesta de la carne doble
(esto es también autentiúnica dura verdad de poesía)"
entonces él supo que siempre había sido
un pocoautor de todos sus poemas.


*
hizo la cama que revolvió la noche
lavó las tazas del desayuno flaco
pasó el aspirador de un trapo por la casa
lavó la camisa las medias los pañuelos
preparó el almuerzo para sobremorir la tarde
lavó los platos los cubiertos inservibles
cosió botones en los pantalones lánguidos
hizo tiempo para hacer compras para hacer comida
y lavó las cacerolas de lo ya vivido
per él la llamó en la noche y l leyó lo escrito
"rehizo la cama que deshizo la noche
lavó en las tazas los sorbos los bostezos
aspiró el polvo de las cosas de la casa
lavó el olor de ambosdós pegado a su camisa
¿fue reina una mañana siquiera en la cocina?
prolongó en la mesa los plazos cotidianos
lavó en las cacerolas los restos de futuro
le puso unos botones a falta de monedas
fue a la carnicería iglesia limpia
y preparó la doble fiesta de la carne
(esto es también únicauténtica verdadura de poesía)"
entonces ella supo que siempre había sido
un pocoautora de todos sus poemas.

bienvenido a deshora/poema/jorge enrique adoum

Bienvenida a deshora
No te esperaba, bruma, y vienes sin decirme
Y entras con ella, la empujas tras su lágrima.
No te maté, niebla tuya de ti
Nimbo con que te rodeas;
Te me fuiste acabando de familiares
Contraseñas y ajenos cinturones,
Te ibas yendo de talvez en tal vez,
Perezoso ese irte, y no pudimos
Ver tu cadera salir de mi costado,
amontonar olvido contra la ventana
en que solía esperar, como si nada,
mañana, el año venidero, el algún día,
pero es duro estar de pie toda la vida
y nos apuntálábamos los pechos, las rodillas,
cuando todos los ojalases tambaleaban,
y es duro recordar, quehacer
de quien espera cartas y no cuerpos,
y yo quiero el olor que la noche dejaba
escapar de alcoholes melancólicos,
y es duro en la mañana reponerse los ojos
y ver los días con una sola estatua
injusta, y ver desmantelado y viudo
y qué desmemoriado el traje
y qué juntas sobre el sexo las manos,
guantes de menta, que me habían acogido,
y cómo te regresas de repente
a la acabada, a la dormida ausencia
de quien ninguna ocupación tiene conmigo,
como si no lloviera, como si no puediéramos
desencruelecernos, reconsiderarnos, rehacer
de nuevo con paciencia los entonces
y estar otravezmente comenzando.

ANTONIO SKARMETA "El cartero de Neruda"

" Ahora te vas a la caleta por la playa y, mientras observas el movimiento del mar, puedes ir inventando metáforas.

—¡Deme un ejemplo!

—Mira este poema: «Aquí en la Isla, el mar, y cuánto mar. Se sale de sí mismo a cada rato. Dice que sí, que no, que no. Dice que sí, en azul, en espuma, en galope. Dice que no, que no. No puede estarse quieto. Me llamo mar, repite pegando en una piedra sin lograr convencerla. Entonces con siete lenguas verdes, de siete tigres verdes, de siete perros verdes, de siete mares verdes, la recorre, la besa, la humedece, y se golpea el pecho repitiendo su nombre». —Hizo una pausa satisfecho—. ¿Qué te parece?

—Raro.

—«Raro.» ¡Qué crítico más severo que eres!

—No, don Pablo. Raro no lo es el poema. Raro es como yo me sentía cuando usted recitaba el poema."

Advertencias y advertidos / Koldo Campos Sagaseta

Estados Unidos y Europa advierten contra el peligro del proteccionismo económico.

La mafia advierte contra el peligro de la extorsión.

La banca advierte contra el peligro de la usura.

El narcotráfico advierte contra el peligro de la adicción.

La delincuencia advierte contra el peligro del delito.

El Diablo advierte contra el peligro del infierno.

Los advertidos advierten contra el peligro de las advertencias.

suicidio colectivo / jorge ángel

Todas mis soledades
se cortaron las venas
con el filo
de tu sonrisa

lunes, 1 de diciembre de 2008

el mago / carlos villalba

El Mago hizo un gesto y eliminó el hambre.
El Mago hizo un gesto y eliminó la ignorancia.
El Mago hizo un gesto y eliminó la enfermedad.
El político hizo un gesto y eliminó al mago.

límites / juan gelman

¿Quién dijo alguna vez: hasta aquí la sed, hasta aquí el agua?
¿Quién dijo alguna vez: hasta aquí el aire, hasta aquí el fuego?
¿Quién dijo alguna vez: hasta aquí el amor, hasta aquí el odio?
¿Quién dijo alguna vez: hasta aquí el hombre, hasta aquí no?
Sólo la esperanza tiene las rodillas nítidas. Sangran.

aviso clasificado / felipe garcía

Aviso Clasificado

Se solicitan jóvenes de mirada y voluntad limpias, que tengan conocimientos de amaneceres y crepúsculos más que de marcas de zapatos, que sepan de solidaridad e inquietudes más que de modelos de carros y apariencias, para trabajar en una patria que a pesar de ambiciones aun sigue siendo uno de los rincones más hermosos de este planeta Tierra. Interesados favor dirigirse a Venezuela. Se recompensará con el azul del cielo, con los colores del arco iris y con mucho futuro.

Felipe García

terrón de azúcar / armando moreno

Desde la mujer del tendero hasta Conchita la pelirroja, y desde Jesús el zapatero hasta Roberto que dirijía la escuela, todos, sin excepción, amanecieron con un terrón de azúcar en la punta de los labios. Sin embargo, los únicos en enterarse de lo sucedido fueron los que se besaron en la mañana.

Petición / jaime sabines

Hay un modo de que me hagas completamente feliz, amor mío: muérete.

cuento indígena

Enzo, un rico comerciante de Puerto Ayacucho, visita a las comunidades indígenas del Alto Orinoco y se horroriza cuando ve a Orawe, indígena Yanomami, tumbado tranquilamente en su chinchorro, mascando tabaco. - ¿Porqué no sales a pescar? - le preguntó Enzo. - Porque ya he pescado bastante por hoy - le contesta Orawe. - ¿Y porque no pescas más de lo que necesitas? - insiste el comerciante. - ¿Y qué iba a hacer con ello? - pregunta a su vez el indio. - Ganarías más dinero. De ese modo podrías poner un motor fuera de borda en tu canoa. Entonces podría llegar más lejos en el río y pescar más peces. Y así ganarías más peces. Y así ganarías lo suficiente para comprarte una red de nylon, con lo que obtendrías más pescado y más dinero. Pronto ganarías para tener dos canoas y hasta dos motores y más rápidos... Entonces serías rico como yo. - ¿Y que haría entonces? - preguntó de nuevo el indígena. - Podrías sentarte y disfrutar de la vida - - ¿Y qué crees que estoy haciendo en este preciso momento? - respondió satisfecho el indio Orawe.

FLOR Y CRONOPIO / julio cortázar

Un cronopio encuentra una flor solitaria en medio de los campos. Primero la va a arrancar, pero piensa que es una crueldad inútil y se pone de rodillas a su lado y juega alegremente con la flor, a saber: le acaricia los pétalos, la sopla para que baile, zumba como una abeja, huele su perfume, y finalmente se acuesta debajo de la flor y se duerme envuelto en una gran paz. La flor piensa: “Es como una flor”.

Armando José Sequera

Le regalamos un telescopio al abuelo. Mas vale que no. Nos pidió que subiéramos su mecedora al techo para establecer su observatorio. Después, que lo subiéramos a él, con cuidado, que tengo esta pierna enferma. Posteriormente, la abuela dijo que ella no quería quedarse sola y hubo que subirla también.

Bajarlos todos los días es más complicado que subirlos: parece que se nos fueran a caer. Una vez en tierra hay que escuchar las narraciones acerca de lo que ambos han visto.

Si supieran que el telescopio no tiene vidrios.

Crónica del Fin del Mundo / eloi yagüe jarque

La nave que transportaba las tropas intergalácticas que invadirían el planeta Tierra dió marcha atrás cuando sus tripulantes vieron el símbolo de la decadencia de esa civilización: una gran M al lado de un restaurante de hamburguesas.

Sueño de la Mariposa / Chuang Tzu

Chuang Tzu soñó que era una mariposa. Al despertar ignoraba si era Tzu que había soñado que era una mariposa o si era una mariposa y estaba soñando que era Tzu.

pequeño cuento / carlos angulo

Él era policía Un golpe en la cara le dió a Marta.
Su hijo que lo vió se fue al cuarto sacó la escopeta de juguete lo apuntó y a quemarropa le disparó al corazón. Su padrastro, atónito, se apretó el pecho: un infarto lo había desvivido de un tirón.

felipe garcía


Tu amor es como la libertad pintada por un niño...

Felipe García

golpe / pía barros

Golpe
Mamá, dijo el niño, ¿qué es un golpe?
Algo que duele muchísimo y deja amoratado el lugar donde te dio.
El niño fue hasta la puerta de casa.
Todo el país que le cupo en la mirada tenía un tinte violáceo.

Pía Barros

si dios fuera mujer / mario benedetti



Si Dios fuera una mujer
Mario Benedetti

¿Y si Dios fuera mujer?
pregunta Juan sin inmutarse,
vaya, vaya si Dios fuera mujer
es posible que agnósticos y ateos
no dijéramos no con la cabeza
y dijéramos sí con las entrañas.

Tal vez nos acercáramos a su divina desnudez
para besar sus pies no de bronce,
su pubis no de piedra,
sus pechos no de mármol,
sus labios no de yeso.

Si Dios fuera mujer la abrazaríamos
para arrancarla de su lontananza
y no habría que jurar
hasta que la muerte nos separe
ya que sería inmortal por antonomasia
y en vez de transmitirnos SIDA o pánico
nos contagiaría su inmortalidad.

Si Dios fuera mujer no se instalaría
lejana en el reino de los cielos,
sino que nos aguardaría en el zaguán del infierno,
con sus brazos no cerrados,
su rosa no de plástico
y su amor no de ángeles.

Ay Dios mío, Dios mío
si hasta siempre y desde siempre
fueras una mujer
qué lindo escándalo sería,
qué venturosa, espléndida, imposible,
prodigiosa blasfemia.

domingo, 30 de noviembre de 2008

yo no lo sé de cierto / jaime sabines



Yo no lo sé de cierto...
Jaime Sabines

Yo no lo sé de cierto, pero supongo
que una mujer y un hombre
un día se quieren,
se van quedando solos poco a poco,
algo en su corazón les dice que están solos,
solos sobre la tierra se penetran,
se van matando el uno al otro.

Todo se hace en silencio. Como
se hace la luz dentro del ojo.
El amor une cuerpos.
En silencio se van llenando el uno al otro.
Cualquier día despiertan, sobre brazos;
piensan entonces que lo saben todo.
Se ven desnudos y lo saben todo.
(Yo no lo sé de cierto. Lo supongo.)

pablo neruda / me gusta cuando callas



Quien colocó el video en youtube dice: "Pablo Neruda (1904-1973)- Escenas familiares de su casa en construcción y los objetos marinos amados por Neruda. Recita en su propia voz los poemas 15 ("Me gustas cuando callas..") y 20 ("Puedo escribir los versos más tristes..."), ambos de "Veinte poemas de amor y una canción desesperada", libro publicado en 1924, cuando el poeta contaba 20 años.
Su verdadero nombre era Neftalí Ricardo Reyes Basoalto. Nació en Parral el año 1904, hijo de don José del Carmen Reyes Morales, obrero ferroviario y doña Rosa Basoalto Opazo, maestra de escuela, fallecida poco años después del nacimiento del poeta.
En 1906 la familia se traslada a Temuco donde su padre se casa con Trinidad Candia Marverde, a quién el poeta menciona en diversos textos como Confieso que he vivido y Memorial de Isla Negra con el nombre de Mamadre. Realiza sus estudios en el Liceo de Hombres de esta ciudad, donde también publica sus primeros poemas en el periódico regional La Mañana. En 1919 obtiene el tercer premio en los Juegos Florales de Maule con su poema Nocturno ideal.
Se radica en Santiago de Chile en 1921 y estudia pedagogía en francés en la Universidad de Chile, donde obtiene el primer premio de la fiesta de la primavera con el poema La canción de fiesta, publicado posteriormente en la revista Juventud. En 1923, publica Crepusculario, que es reconocido por escritores como Alone, Raúl Silva Castro y Pedro Prado. Al año siguiente aparece en Editorial Nascimento sus Veinte poemas de amor y una canción desesperada, en el que todavía se nota una influencia del modernismo. Posteriormente se manifiesta un propósito de renovación formal de intención vanguardista en tres breves libros publicados en 1926: El habitante y su esperanza ; Anillos (en colaboración con Tomás Lagos) y Tentativa del hombre infinito.
Comienza su carrera diplomática en 1927 cuando es nombrado cónsul en Rangún, Birmania. En sus múltiples viajes conoce en Buenos Aires a Federico García Lorca y en Barcelona a Rafael Alberti. En 1935, Manuel Altolaguirre le entrega la dirección a Neruda de la revista Caballo verde para la poesía en la cual es compañero de los poetas de la generación del 27. Ese mismo año aparece la edición madrileña de Residencia en la tierra.
En 1936 al estallar la guerra civil española, muere García Lorca, Neruda es destituido de su cargo consular, y escribe España en el corazón.
En 1945 obtiene el premio Nacional de Literatura.
En 1950 publica Canto General, texto en que su poesía adopta una intención social, ética y política. En 1952 publica Los versos del capitán y en 1954 Las uvas y el viento y Odas elementales. En 1958 aparece Estravagario con un nuevo cambio en su poesía. En 1965 se le otorga el título de doctor honoris causa en la Universidad de Oxford , Gran Bretaña. En octubre de 1971 recibe el Premio Nobel de Literatura.
Muere en Santiago -al parecer de pena- a pocos días del sangriento golpe militar, el 23 de septiembre de 1973. Póstumamente se publicaron sus memorias en 1974, con el título Confieso que he vivido."

Ramón López Verlarde

este video contiene algunos fragmentos de poemas de Ramón López Verlarde, nacido en Jerez de la Frontera, Zacatecas-México, en el mismo año en que Rubén Darío publicó su revista Azul, López Velarde empezó a escribir cuando ingresó en el Seminario Conciliar de Zacatecas en el año de 1900. Después fue a estudiar al Seminario de Santa María de Guadalupe en Aguascalientes y posteriormente al Instituto de Ciencias de la misma ciudad....

feliz cumple silvio!!!!!


feliz cumple silvio! gracias por tanta magia!!!!!!!!!!!

frases de silvio rodríguez (faltarán un montónnnnn)....


El día en que se pierda el principio de autodeterminación, en el universo se forma el caos. Pero así como pienso que cada país merece respeto, creo que cada país tiene que hacerse respetar.


Yo espero que siempre existan gente y ocasiones, que siempre existan personas que sepan aprovechar las coyunturas para con una palanca de buenas ideas y de buenas intenciones, dar un vuelco a las cosas.


Supongo que he tenido todas las tentaciones, las de Cristo y las de Silvio Rodríguez. Pero si uno no tuviera tentaciones sería fácil, no existiría el mérito.
El mérito es el triunfo del espíritu sobre las tentaciones. Pero el hombre tiene memoria, y habrá que ser un desmemoriado, pero no todos los hombres lo son.

Yo dudo de ésos aportes a la música, y considero que he sido una especie de espejismo que crearon determinadas circunstancias, porque el día que se analicen profundamente algunos aspectos de mi trabajo, se va a llegar a la conclusión de que en realidad no es tan valioso. Eso lo he pensado muchas veces. Expreso cierta inseguridad en lo que hago.


-¿Ustedes se han preguntado por qué hago esto? Si hay algo en la vida que me ha enseñado, es que los hombres no deben huir de las cosas que los sobrecogen, y que la única forma de librarse de ellas es enfrentándolas... Yo hago esto para enfrentarme a mi fantasma.


No hay diferencia entre ser niño y ser rebelde; diría que es casi una redundancia. Sobre todo porque nos educan bastante mal. Nos meten muchas ideas: niño, no hagas esto, no hagas lo otro, esto es malo, esto es bueno; y el niño se rebela cuando ve una contradicción entre lo que le han contado de cómo deben ser las cosas y como ve cómo es la gente. Ahí nace la rebeldía, y por eso te digo que no es nada contradictorio esto. Cuando uno es niño es cuando se enfrenta a las contradicciones por primera vez. Y ese germen de las contradicciones comienza a convertirse -por elementos de carácter o genéticos- en cosas que te aplastan o que te impelen.


No he tomado la canción solo como goce estético (gozo mucho la parte estética) sino que también es una forma de expresar mis inquietudes, mis interrogantes, mis inconformidades, mis soluciones o mis preguntas sin soluciones o mis proposiciones.


Ya que seguimos soñando te diré que me hubiera gustado estar en el Bayamo insurgente de 1868; me hubiera gustado pertenecer a la caballería del Mayor; desembarcar con Marti y Gómez por Playitas; me hubiera gustado estar en la manifestación donde mataron a Trejo y coger el barco en que Pablo de la Torriente marcho a España a luchar por la República; hubiera ido contento al Moncada; hubiera navegado en el Granma; hubiera hecho la guerra en la Sierra, o en el llano, junto a Fidel; hubiera querido estar en la Quebrada del Yuro, en aquel octubre del 68. Ahora sencillamente me gustaría tripular una nave cósmica. Y como pasatiempo, dibujar, hacer fotografías, y quizás canciones.


cuando era muy joven era bastante reflexivo. A veces uno con los años tiende a memorizar lo que uno era, porque uno se ve en el presente, en la actualidad, siempre en el último escalón que ha alcanzado, en el último peldaño, en el último destello de lucidez, desde el cual analiza, mira, reflexiona, pero a veces..


Uno se equivoca a los cincuenta también, en cosas que no se equivocaba a los veinte. Es posible, es muy posible.


Se corre el riesgo de ser humano y de vivir en un planeta y no saber qué rayos es lo que se ha hecho, imagínate tu. En estos tiempos estamos embarcados todos.


por eso valoro tanto el azar, tanto como a la música. El azar es hasta una potestad, como mecanografiar mal una palabra y que te salga otra mejor que la que tenías. Eso.


Creo que mis canciones, en cierto sentido, siempre han sido una especie de grito –con pocos decibelios, porque la bulla no me gusta–. Creo que todo el que tiene algo que decir, lo hace desde su propia conmoción. Casi todas mis canciones llevan implícita alguna queja y creo que no hubieran podido ser de otra manera. Querer atrapar la vida conlleva una angustia tremenda y estoy seguro de que los que hicieron las pinturas rupestres la sintieron.

sábado, 29 de noviembre de 2008

violeta luna / afuera de la trampa

VIOLETA LUNA
(Guayaquil, 1943)

AFUERA DE LA TRAMPA

Dejadme por favor vivir mi vida,
amándola,
mordiéndola,
quitándole el veneno,
limpiándola.
Dejadme que me salve o me condene,
dejadme que vomite,
que sangre,
que sonría,
que cante por el fin de tanta guerra,
que llore por la guerra de los fines.
Dejadme que en silencio
escriba en vuestra culpa una sentencia,
que borre la sentencia de la culpa.
Dejadme que me hunda,
que gima,
que flote en lo intermedio,
que sueñe,
que pueda en una esquina
pisar un alacrán inofensivo.
Dejadme cuantas veces
firmar cada recado sin mi nombre,
dejad que me equivoque,
que escupa,
que piense,
que llame con bondad al malo bueno,
que llame con maldad al bueno malo.
dejadme simplemente
que cuente por decenas,
qué coma con la izquierda,
que te ame sin remedio.
Dejadme por favor vivir mi vida,
que escape,
que reniegue,
que grite por las lluvias que se enlodan,
que ría por el lodo que se enlluvia.
Dejadme si queréis la trampa abierta,
que caiga el corazón con todo el peso,
dejad, pero dejad
afuera de la trampa mi cabeza.

miércoles, 26 de noviembre de 2008

des-eo / diego cazar

DES-EO

me des-cubro
te des-cuidas
me des-calzas
te des-armo
me des-velas
te des-nudo
me des-bordas
te des-espero
me des-mientes
te des-encanto
me des-integro
me des-apareces
te des-ahogo
me des-garras
te des-ayuno
me des-almas
te des-canto
me des-caminas
te des-canso
me des-engañas
te des-ato
me des-hojas
te des-hago
me des-cuidas
te des-pido

diego cazar
quito-ecuador

José Martí

Mover un país, por pequeño que sea, es obra
de gigantes.
Y quien no se sienta gigante de amor,
o de valor, o de pensamiento, o de paciencia, no
debe emprenderlo.”

martes, 25 de noviembre de 2008

Eduardo Galeano

Los expertos saben convertir a las mercancías en mágicos conjuntos contra la soledad. Las cosas tienen atributos humanos: acarician, acompañan, comprenden, ayudan, el perfume te besa y el auto es el amigo que nunca falla. La cultura del consumo ha hecho de la soledad el más lucrativo de los mercados. Los agujeros del pecho se llenan atiborrándolos de cosas, o soñando con hacerlo. Y las cosas no solamente pueden abrazar: ellas también pueden ser símbolos de ascenso social, salvoconductos para atravesar las aduanas de la sociedad de clases, llaves que abren las puertas prohibidas. Cuanto más exclusivas, mejor: las cosas te eligen y te salvan del anonimato multitudinario. La publicidad no informa sobre el producto que vende, o rara vez lo hace. Eso es lo de menos. Su función primordial consiste en compensar frustraciones y alimentar fantasías: ¿En quién quiere usted convertirse comprando esta loción de afeitar?

Subcomandante Marcos

Para detenernos, rendirnos y aniquilarnos, el poderoso usó toda su fuerza. Grandes y muchas son las máquinas de guerra que llenan nuestros suelos y nuestros cielos. Mucha y grande es la muerte con la que el poderoso ataca nuestra vida. Aquí estamos, seguimos aquí. No nos hemos callado, no nos rendiremos.
Para engañarnos y comprarnos, el poderoso compró palabras y conciencias. Dijo el poderoso que la paz quería, y detrás de su promesa venían la traición y la muerte. A nuestra verdad, el poderoso opone la mentira. Contra nuestra memoria, lanzó el olvido. Aquí estamos, seguimos aquí. No nos hemos olvidado, no nos rendiremos.
Nuestra guerra fue y es para que la memoria recupere su lugar en la historia. No habrá paz mientras el olvido siga siendo el único futuro.
Nuestra guerra fue y es para que la dignidad sea respetada por los todos que son. No habrá paz, mientras el desprecio al diferente siga siendo la única relación posible.
Nuestra guerra fue y es para que la verdad de los distintos sea escuchada y entendida, para que todos los mundos tengan su lugar en el mundo. No habrá paz mientras la mentira sea la única palabra para la que hay oídos, y la intolerancia y el cinismo las banderas únicas.
Nosotros los zapatistas nos hablamos por nosotros mismos y traemos también la palabra de todos los muertos que se murieron muy callados. Por ellos hablamos, en nuestra palabra hablan los muertos todos, los callados de siempre.
Resistiremos hasta que caminen sus palabras de los olvidados. Lucharemos hasta que hablen los silencios de los callados. Moriremos hasta que vivan los muertos.

El Libro de las Preguntas - Pablo Neruda

1.
Por qué los inmensos aviones
no se pasean con sus hijos?

Cuál es el pájaro amarillo
que llena el nido de limones?

Por qué no enseñan a sacar
miel del sol a los helicópteros?

Dónde dejó la luna llena
su saco nocturno de harina?

2.
Si he muerto y no me he dado cuenta
a quién le pregunto la hora?

De dónde saca tantas hojas
la primavera de Francia?

Dónde puede vivir un ciego
a quien persiguen las abejas?

Si se termina el amarillo
con qué vamos a hacer el pan?

3.
Dime, la rosa está desnuda
o sólo tiene ese vestido?

Por qué los árboles esconden
el esplendor de sus raíces?

Quién oye los remordimientos
del automóvil criminal?

Hay algo más triste en el mundo
que un tren inmóvil en la lluvia?

4.
Cuántas iglesias tiene el cielo?

Por qué no ataca el tiburón
a las impávidas sirenas?

Conversa el humo con las nubes?

Es verdad que las esperanzas
deben regarse con rocío?

5.
Qué guardas bajo tu joroba?
dijo un camello a una tortuga.

Y la tortuga preguntó:
Qué conversas con las naranjas?

Tiene más hojas un peral
que Buscando el Tiempo Perdido?

Por qué se suicidan las hojas
cuando se sienten amarillas?

6.
Por qué el sombrero de la noche
vuela con tantos agujeros?

Qué dice la vieja ceniza
cuando camina junto al fuego?

Por qué lloran tanto las nubes
y cada vez son más alegres?

Para quién arden los pistilos
del sol en sombra del eclipse?

Cuántas abejas tiene el día?

7.
Es paz la paz de la paloma?
El leopardo hace la guerra?

Por qué enseña el profesor
la geografía de la muerte?

Qué pasa con las golondrinas
que llegan tarde al colegio?

Es verdad que reparten cartas
transparentes, por todo el cielo?

8.
Qué cosa irrita a los volcanes
que escupen fuego, frío y furia?

Por qué Cristóbal Colón
no pudo descubrir a España?

Cuántas preguntas tiene un gato?

Las lágrimas que no se lloran
esperan en pequeños lagos?

O serán ríos invisibles
que corren hacia la tristeza?

9.
Es este mismo el sol de ayer
o es otro el fuego de su fuego?

Cómo agradecer a las nubes
esa abundancia fugitiva?

De dónde viene el nubarrón
con sus sacos negros de llanto?

Dónde están los nombres aquellos
dulces como tortas de antaño?

Dónde se fueron las Donaldas,
las Clorindas, las Eduvigis?

10.
Qué pensarán de mi sombrero,
en cien años más, los polacos?

Qué dirán de mi poesía
los que no tocaron mi sangre?

Cómo se mide la espuma
que resbala de la cerveza?

Qué hace una mosca encarcelada
en un soneto de Petrarca?

11.
Hasta cuándo hablan los demás
si ya hemos hablado nosotros?

Qué diría José Martí
del pedagogo Marinello?

Cuántos años tiene Noviembre?

Qué sigue pagando el Otoño
con tanto dinero amarillo?

Cómo se llama ese cocktail
que mezcla vodka con relámpagos?

12.
Y a quién le sonríe el arroz
con infinitos dientes blancos?

Por qué en las épocas oscuras
se escribe con tinta invisible?

Sabe la bella de Caracas
cuántas faldas tiene la rosa?

Por qué me pican las pulgas
y los sargentos literarios?

13.
Es verdad que sólo en Australia
hay cocodrilos voluptuosos?

Cómo se reparten el sol
en el naranjo las naranjas?

Venía de una boca amarga
la dentadura de la sal?

Es verdad que vuela de noche
sobre mi patria un cóndor negro?

14.
Y qué dijeron los rubíes
ante el jugo de las granadas?

Pero por qué no se convence
el Jueves de ir después del Viernes?

Quiénes gritaron de alegría
cuando nació el color azul?

Por qué se entristece la tierra
cuando aparecen las violetas?

15.
Pero es verdad que se prepara
la insurrección de los chalecos?

Por qué otra vez la Primavera
ofrece sus vestidos verdes?

Por qué ríe la agricultura
del llanto pálido del cielo?

Cómo logró su libertad
la bicicleta abandonada?

16.
Trabajan la sal y el azúcar
construyendo una torre blanca?

Es verdad que en el hormiguero
los sueños son obligatorios?

Sabes qué meditaciones
rumia la tierra en el otoño?

(Por qué no dar una medalla
a la primera hoja de oro?)

17.
Te has dado cuenta que el Otoño
es como una vaca amarilla?

Y cómo la bestia otoñal
es luego un oscuro esqueleto?

Y cómo el invierno acumula
tantos azules lineales?

Y quién pidió a la Primavera
su monarquía transparente?

18.
Cómo conocieron las uvas
la propaganda del racimo?

Y sabes lo que es más difícil
entre granar y desgranar?

Es malo vivir sin infierno:
no podemos reconstruirlo?

Y colocar al triste Nixon
con el traste sobre el brasero?

Quemándolo a fuego pausado
con napalm norteamericano?

19.
Han contado el oro que tiene
el territorio del maíz?

Sabes que es verde la neblina
a mediodía, en Patagonia?

Quién canta en el fondo del agua
en la laguna abandonada?

De qué ríe la sandía
cuando la están asesinando?

20.
Es verdad que el ámbar contiene
las lágrimas de las sirenas?

Cómo se llama una flor
que vuela de pájaro en pájaro?

No es mejor nunca que tarde?

Y por qué el queso se dispuso
a ejercer proezas en Francia?

21.
Y cuando se fundó la luz
esto sucedió en Venezuela?

Dónde está el centro del mar?
Por qué no van allí las olas?

Es cierto que aquel meteoro
fue una paloma de amatista?

Puedo preguntar a mi libro
si es verdad que yo lo escribí?

22.
Amor, amor aquel y aquella,
si ya no son, dónde se fueron?

Ayer, ayer dije a mis ojos
cuándo volveremos a vernos?

Y cuando se muda el paisaje
son tus manos o son tus guantes?

Cuando canta el azul del agua
cómo huele el rumor del cielo?

23.
Se convierte en pez volador
si transmigra la mariposa?

Entonces no era verdad
que vivía Dios en la luna?

De qué color es el olor
del llanto azul de las violetas?

Cuántas semanas tiene un día
y cuántos años tiene un mes?

24.
El 4 es 4 para todos?
Son todos los sietes iguales?

Cuando el preso piensa en la luz
es la misma que te ilumina?

Has pensado de qué color
es el Abril de los enfermos?

Qué monarquía occidental
se embandera con amapolas?

25.
Por qué para esperar la nieve
se ha desvestido la arboleda?

Y cómo saber cual es Dios
entre los Dioses de Calcuta?

Por qué viven tan harapientos
todos los gusanos de seda?

Por qué es tan dura la dulzura
del corazón de la cereza?

Es porque tiene que morir
o porque tiene que seguir?

26.
Aquel solemne Senador
que me atribuía un castillo

devoró ya con su sobrino
la torta del asesinato?

A quién engaña la magnolia
con su fragancia de limones?

Dónde deja el puñal el águila
cuando se acuesta en una nube?

27.
Murieron tal vez de vergüenza
estos trenes que se extraviaron?

Quién ha visto nunca el acíbar?

Dónde se plantaron los ojos
del camarada Paul Éluard?

Hay sitio para unas espinas?
le preguntaron al rosal.

28.
Por qué no recuerdan los viejos
las deudas ni las quemaduras?

Era verdad aquel aroma
de la doncella sorprendida?

Por qué los pobres no comprenden
apenas dejan de ser pobres?

Dónde encontrar una campana
que suene adentro de tus sueños?

29.
Qué distancia en metros redondos
hay entre el sol y las naranjas?

Quién despierta al sol cuando duerme
sobre su cama abrasadora?

Canta la tierra como un grillo
entre la música celeste?

Verdad que es ancha la tristeza,
delgada la melancolía?

30.
Cuando escribió su libro azul
Rubén Darío no era verde?

No era escarlata Rimbaud,
Góngora de color violeta?

Y Victor Hugo tricolor?
Y yo a listones amarillos?

Se juntan todos los recuerdos
de los pobres de las aldeas?

Y en una caja mineral
guardaron sus sueños los ricos?

31.
A quién le puedo preguntar
qué vine a hacer en este mundo?

Por qué me muevo sin querer,
por qué no puedo estar inmóvil?

Por qué voy rodando sin ruedas,
volando sin alas ni plumas,

y qué me dio por transmigrar
si viven en Chile mis huesos?

32.
Hay algo más tonto en la vida
que llamarse Pablo Neruda?

Hay en el cielo de Colombia
un coleccionista de nubes?

Por qué siempre se hacen en Londres
los congresos de los paraguas?

Sangre color de amaranto
tenía la reina de Saba?

Cuando lloraba Baudelaire
lloraba con lágrimas negras?

33.
Y por qué el sol es tan mal amigo
del caminante en el desierto?

Y por qué el sol es tan simpático
en el jardín del hospital?

Son pájaros o son peces
en estas redes de la luna?

Fue adonde a mí me perdieron
que logré por fin encontrarme?

34.
Con las virtudes que olvidé
me puedo hacer un traje nuevo?

Por qué los ríos mejores
se fueron a correr en Francia?

Por qué no amanece en Bolivia
desde la noche de Guevara?

Y busca allí a los asesinos
su corazón asesinado?

Tienen primero gusto a lágrimas
las uvas negras del desierto?

35.
No será nuestra vida un túnel
entre dos vagas claridades?

O no será una claridad
entre dos triángulos oscuros?

O no será la vida un pez
preparado para ser pájaro?

La muerte será de no ser
o de sustancias peligrosas?

36.
No será la muerte por fin
una cocina interminable?

Qué harán tus huesos disgregados,
buscarán otra vez tu forma?

Se fundirá tu destrucción
en otra voz y en otra luz?

Formarán parte tus gusanos
de perros o de mariposas?

37.
De tus cenizas nacerán
checoeslovacos o tortugas?

Tu boca besará claveles
con otros labios venideros?

Pero sabes de dónde viene
la muerte, de arriba o de abajo?

De los microbios o los muros,
de las guerras o del invierno?

38.
No crees que vive la muerte
dentro del sol de una cereza?

No puede matarte también
un beso de la primavera?

Crees que el luto te adelanta
la bandera de tu destino?

Y encuentras en la calavera
tu estirpe a hueso condenada?

39.
No sientes también el peligro
en la carcajada del mar?

No ves en la seda sangrienta
de la amapola una amenaza?

No ves que florece el manzano
para morir en la manzana?

No lloras rodeado de risa
con las botellas del olvido?

40.
A quién el cóndor andrajoso
da cuenta de su cometido?

Cómo se llama la tristeza
en una oveja solitaria?

Y qué pasa en el palomar
si aprenden canto las palomas?

Si las moscas fabrican miel
ofenderán a las abejas?

41.
Cuánto dura un rinoceronte
después de ser enternecido?

Qué cuentan de nuevo las hojas
de la reciente primavera?

Las hojas viven en invierno
en secreto, con las raíces?

Qué aprendió el árbol de la tierra
para conversar con el cielo?

42.
Sufre más el que espera siempre
que aquel que nunca esperó a nadie?

Dónde termina el arco iris,
en tu alma o en el horizonte?

Tal vez una estrella invisible
será el cielo de los suicidas?

Dónde están las viñas de hierro
de donde cae el meteoro?

43.
Quién era aquella que te amó
en el sueño, cuando dormías?

Dónde van las cosas del sueño?
Se van al sueño de los otros?

Y el padre que vive en los sueños
vuelve a morir cuando despiertas?

Florecen las plantas del sueño
y maduran sus graves frutos?

44.
Dónde está el niño que yo fui,
sigue adentro de mí o se fue?

Sabe que no lo quise nunca
y que tampoco me quería?

Por qué anduvimos tanto tiempo
creciendo para separarnos?

Por qué no morimos los dos
cuando mi infancia se murió?

Y si el alma se me cayó
por qué me sigue el esqueleto?

45.
El amarillo de los bosques
es el mismo del año ayer?

Y se repite el vuelo negro
de la tenaz ave marina?

Y donde termina el espacio
se llama muerte o infinito?

Qué pesan más en la cintura,
los dolores o los recuerdos?

46.
Y cómo se llama ese mes
que está entre Diciembre y Enero?

Con qué derecho numeraron
las doce uvas del racimo?

Por qué no nos dieron extensos
meses que duren todo el año?

No te engañó la primavera
con besos que no florecieron?

47.
Oyes en medio del otoño
detonaciones amarillas?

Por qué razón o sinrazón
llora la lluvia su alegría?

Qué pájaros dictan el orden
de la bandada cuando vuela?

De qué suspende el picaflor
su simetría deslumbrante?

48.
Son los senos de las sirenas
las redondescas caracolas?

O son olas petrificadas
o juego inmóvil de la espuma?

No se ha incendiado la pradera
con las luciérnagas salvajes?

Los peluqueros del otoño
despeinaron los crisantemos?

49.
Cuando veo de nuevo el mar
el mar me ha visto o no me ha visto?

Por qué me preguntan las olas
lo mismo que yo les pregunto?

Y por qué golpean la roca
con tanto entusiasmo perdido?

No se cansan de repetir
su declaración a la arena?

50.
Quién puede convencer al mar
para que sea razonable?

De qué le sirve demoler
ámbar azul, granito verde?

Y para qué tantas arrugas
y tanto agujero en la roca?

Yo llegué de detrás del mar
y dónde voy cuando me ataja?

Por qué me he cerrado el camino
cayendo en la trampa del mar?

51.
Por qué detesto las ciudades
con olor a mujer y orina?

No es la ciudad el gran océano
de los colchones que palpitan?

La oceanía de los aires
no tiene islas y palmeras?

Por qué volví a la indiferencia
del océano desmedido?

52.
Cuánto medía el pulpo negro
que oscureció la paz del día?

Eran de hierro sus ramales
y de fuego muerto sus ojos?

Y la ballena tricolor
por qué me atajó en el camino?

53.
Quién devoró frente a mis ojos
un tiburón lleno de pústulas?

Tenía la culpa el escualo
o los peces ensangrentados?

Es el orden o la batalla
este quebranto sucesivo?

54.
Es verdad que las golondrinas
van a establecerse en la luna?

Se llevarán la primavera
sacándola de las cornisas?

Se alejarán en el otoño
las golondrinas de la luna?

Buscarán muestras de bismuto
a picotazos en el cielo?

Y a los balcones volverán
espolvoreadas de ceniza?

55.
Por qué no mandan a los topos
y a las tortugas a la luna?

Los animales ingenieros
de cavidades y ranuras

no podrían hacerse cargo
de estas lejanas inspecciones?

56.
No crees que los dromedarios
preservan luna en sus jorobas?

No la siembran en los desiertos
con persistencia clandestina?

Y no estará prestado el mar
por un corto tiempo a la tierra?

No tendremos que devolverlo
con sus mareas a la luna?

57.
No será bueno prohibir
los besos interplanetarios?

Por qué no analizar las cosas
antes de habilitar planetas?

Y por qué no el ornitorrinco
con su espacial indumentaria?

Las herraduras no se hicieron
para caballos de la luna?

58.
Y qué palpitaba en la noche?
Eran planetas o herraduras?

Debo escoger esta mañana
entre el mar desnudo y el cielo?

Y por qué el cielo está vestido
tan temprano con sus neblinas?

Qué me esperaba en Isla Negra?
La verdad verde o el decoro?

59.
Por qué no nací misterioso?
Por qué crecí sin compañía?

Quién me mandó desvencijar
las puertas de mi propio orgullo?

Y quién salió a vivir por mí
cuando dormía o enfermaba?

Qué bandera se desplegó
allí donde no me olvidaron?

60.
Y qué importancia tengo yo
en el tribunal del olvido?

Cuál es la representación
del resultado venidero?

Es la semilla cereal
con su multitud amarilla?

O es el corazón huesudo
el delegado del durazno?

61.
La gota viva del azogue
corre hacia abajo o hacia siempre?

Mi poesía desdichada
mirará con los ojos míos?

Tendré mi olor y mis dolores
cuando yo duerma destruido?

62.
Qué significa persistir
en el callejón de la muerte?

En el desierto de la sal
cómo se puede florecer?

En el mar del no pasa nada
hay vestido para morir?

Cuando ya se fueron los huesos
quién vive en el polvo final?

63.
Cómo se acuerda con los pájaros
la traducción de sus idiomas?

Cómo le digo a la tortuga
que yo le gano en lentitud?

Cómo le pregunto a la pulga
las cifras de su campeonato?

Y a los claveles qué les digo
agradeciendo su fragancia?

64.
Por qué mi ropa desteñida
se agita como una bandera?

Soy un malvado alguna vez
o todas las veces soy bueno?

Es que se aprende la bondad
o la máscara de la bondad?

No es blanco el rosal del malvado
y negras las flores del bien?

Quién da los nombres y los números
al inocente innumerable?

65.
Brilla la gota de metal
como una sílaba en mi canto?

Y no se arrastra una palabra
a veces como una serpiente?

No crepitó en tu corazón
un nombre como una naranja?

De qué río salen los peces?
De la palabra platería?

Y no naufragan los veleros
por un exceso de vocales?

66.
Echan humo, fuego y vapor
las o de las locomotoras?

En qué idioma cae la lluvia
sobre ciudades dolorosas?

Qué suaves sílabas repite
el aire del alba marina?

Hay una estrella más abierta
que la palabra amapola?

Hay dos colmillos más agudos
que las sílabas de chacal?

67.
Puedes amarme, silabaria,
y darme un beso sustantivo?

Un diccionario es un sepulcro
o es un panal de miel cerrado?

En qué ventana me quedé
mirando el tiempo sepultado?

O lo que miro desde lejos
es lo que no he vivido aún?

68.
Cuándo lee la mariposa
lo que vuela escrito en sus alas?

Qué letras conoce la abeja
para saber su itinerario?

Y con qué cifras va restando
la hormiga sus soldados muertos?

Cómo se llaman los ciclones
cuando no tienen movimiento?

69.
Caen pensamientos de amor
en los volcanes extinguidos?

Es un cráter una venganza
o es un castigo de la tierra?

Con qué estrellas siguen hablando
los ríos que no desembocan?

70.
Cuál es el trabajo forzado
de Hitler en el infierno?

Pinta paredes o cadáveres?
Olfatea el gas de sus muertos?

Le dan a comer las cenizas
de tantos niños calcinados?

O le han dado desde su muerte
de beber sangre en un embudo?

O le martillan en la boca
los arrancados dientes de oro?

71.
O le acuestan para dormir
sobre sus alambres de púas?

O le están tatuando la piel
para lámparas del infierno?

O lo muerden sin compasión
los negros mastines del fuego?

O debe de noche y de día
viajar sin tregua con sus presos?

O debe morir sin morir
eternamente bajo el gas?

72.
Si todos los ríos son dulces
de dónde saca sal el mar?

Cómo saben las estaciones
que deben cambiar de camisa?

Por qué tan lentas en invierno
y tan palpitantes después?

Y cómo saben las raíces
que deben subir a la luz?

Y luego saludar al aire
con tantas flores y colores?

Siempre es la misma primavera
la que repite su papel?

73.
Quién trabaja más en la tierra,
el hombre o el sol cereal?

Entre el abeto y la amapola
a quién la tierra quiere más?

Entre las orquídeas y el trigo
para cuál es la preferencia?

Por qué tanto lujo a una flor
y un oro sucio para el trigo?

Entra el Otoño legalmente
o es una estación clandestina?

74.
Por qué se queda en los ramajes
hasta que las hojas se caen?

Y dónde se quedan colgados
sus pantalones amarillos?

Verdad que parece esperar
el Otoño que pase algo?

Tal vez el temblor de una hoja
o el tránsito del universo?

Hay un imán bajo la tierra,
imán hermano del Otoño?

Cuándo se dicta bajo tierra
la designación de la rosa?

La historia de un caballo que era bien bonito - Aquiles Nazoa

Yo conocí un caballo que se alimentaba de jardines.

Todos estábamos muy contentos con esa costumbre del caballo; y el caballo también porque como se alimentaba de jardines, cuando uno le miraba los ojos las cosas se veían de todos los colores en los ojos del caballo.

Al caballo también le gustaba mirarlo a uno con sus ojos de colores, y lo mejor del asunto es que con los ojos de ese caballo que comía jardines se veían todas las cosas que el caballo veía, pero claro que más bonitas, porque se veían como si tuvieran siete años. Yo a veces esperaba que el caballo estuviera viendo para donde estaba mi escuela. El entendía la cosa y miraba para allá, y entonces mi hermana Elba y yo nos íbamos para la escuela a través de los ojos del caballo.

¡Qué caballo tan agradable!

A nosotros cuando más nos gustaba verlos era aquellos domingos por la mañana que estaban tocando la retreta y ese caballo de colores llegaba por ahi vistiéndose de alfombra por todas partes que pasaba.

Yo creo que ese caballo era muy cariñoso. Ese caballo tenía cara de que le hubiera gustado darle un paseíto a uno, pero quien se iba a montar en aquel pueblo en un caballo como ese, pues a la gente de ahí le daba pena; ahí nadie tenía ropa aparente.

Como sería de bonito ese caballo que con ese caballo se alzó Miranda contra el gobierno porque se inspiró en el tricolor de sus labios y en el rubio de sus ojos.

Ese caballo si se veía bonito cuando estaban tocando ahí esa retreta y el Señor Presidente de la Sociedad de Jardineros lo traía para que se desayunara en la plaza pública.

Que caballo tan considerado. Ese caballo podía estar muy hambriento, pero cuando los jardineros lo traían para que se comiera la plaza, el sabia que en el pueblo había mucha gente necesitada de todo lo que alli le servían, y no se comía sino a los músicos.

Y los músicos encantados. Como el caballo estaba lleno de flores por dentro, ellos ahí se sentían inspirados y se la pasaban tocando música dentro del caballo.

Bueno, y como el caballo se alimentaba de jardines y tenía todos los colores de las flores que se comía, la gente que pasaba por ahí y lo veía esperando que los jardineros le echaran su comida decían: míreme ese caballo tan bonito que está ahí espantándose las mariposas con el rabo.

Como sería de bonito ese caballo que con ese caballo se alzó Miranda contra el gobierno porque se inspiró en el tricolor de sus labios y en el rubio de sus ojos.

Y el caballo sabía que decían todo eso, y se quedaba ahí quietecito sin moverse para que también dijeran que aquel caballo era demasiado bonito para vivir en un pueblo tan feo, y unos doctores que pasaron lo que dijeron es que lo que parecía ese caballo es que estaba pintado en el pueblo.

¡Así era de bonito ese caballo!

Todo el mundo era muy cariñoso con ese caballo tan bonito, y más las señoras y señoritas del pueblo, que estaban muy contentas con aquel caballo que se alimentaba de jardines. ¿No ve que como consecuencia de aquella alimentación lo que el caballo echaba por el culito eran rosas?

Así, cuando las damas querían adornar su casa o poner un matrimonio, no tenían más que salir al medio de la calle y recoger algunas de las magníficas rosas con que el caballo le devolvía sus jardines al pueblo.

Una vez en ese pueblo se declaró la guerra mundial, y viendo un general el hermoso caballo que comía jardines, se montó en él y se lo llevó para esa guerra mundial que había ahí, diciéndole: mira caballo, déjate de jardines y de maricadas de esas y ponte al servicio de tal y cual cosa, que yo voy a defender los principios y tal, y las instituciones y tal, y el legado de yo no se quien, y bueno, caballo, todas esas lavativas que tu sabes que uno defiende.

Apenas llegaron ahí a la guerra mundial, otro general que defendía el patrimonio y otras cosas así, le tiró un tiro al general que estaba de este lado de la alcabala, y al que mató fue al caballo que se alimentaba de jardines, que cayo a tierra echando una gran cantidad de pájaros por la herida porque el general lo había herido en el corazón.

La guerra por fin tuvo que terminarse porque si no hubiera quedado a quien venderle el campo de batalla.

Después que terminó la guerra, en ese punto que cayó muerto el caballo que comía jardines, la tierra se cubrió de flores.

Una vez venía de regreso para su pueblo uno que no tenía nombre y estaba muy solo y había ido a recorrer mundo buscando novia porque se sentía bastante triste, ¿no ve que le mataron hasta el perro con eso de la defensa de los principios y tal?, y no había encontrado novia alguna porque era muy pobre y no tenia ninguna gracia.

Al ver ese reguero de flores que había ahí donde había muerto el caballo que comía jardines, el hombre cogió una de su gusto y se la puso en el pecho. Cuando llegó al pueblo encontró a su paso una muchacha que al verlo con su flor en el pecho, dijo para ella misma: que joven tan delicado que se pone en el pecho esa flor tan bonita. Hay cosas bonitas que son tristes también, como esa flor que se puso en el pecho ese joven que viene ahí. Ese debe ser una persona muy decente y a lo mejor es un poeta.

Lo que ella estaba diciendo dentro de ella con ese asunto, el hombre no lo escuchó con el oído, sino como lo oyó fue con esa flor que tenía en el pecho.


Eso no es gracia; cualquiera pude oír cosas por medio de una flor que se ha puesto en el pecho. La cuestión es que uno sea un hombre bueno y que reconozca que no hay mayores diferencias entre una flor colocada en el pecho de un hombre y la herida de que se muere inocentemente en el campo un pobre caballo.

Qué iba a hacer, le regaló a aquella bonita muchacha la única cosa que había tenido en su vida, le regaló a la muchacha aquella flor que le servía a uno para oír cosas: ¿quién con un regalo tan bueno no enamora inmediatamente a una muchacha?

El día que se casaron, como el papá de ella era un señor muy rico porque tenía una venta de raspado, le regaló como veinticinco tablas viejas, dos ruedas de carreta y una moneda de oro.

Con las veinticinco tablas el hombre de la flor se fabricó una carreta y a la carreta le pintó un caballo, y con la moneda de oro compro una cesta de flores y se las dio de comer al caballo que pinto en la carreta, y ese fue el origen de un cuento que creo haber contado yo alguna vez y que empezaba: "Yo conocí un caballo que se alimentaba de jardines".

América desnuda - Samuel Eduardo Quenza

Yo imagino la América desnuda,
-erótica es su armazón telúrica-
erótico el perfil de sus pezones
manando la fría leche de los páramos.
eróticas sus venas: Amazonas,
Plata, Orinoco, Paraná, Río Bravo,
(Eva escapada a algún Demián imberbe)

América es la hembra que idealizo
unas veces tendida la verde grama del estero,
otras más, empinada,
afincada en sus dedos que hunden sus mil samanes
en el océano oculto donde flota
su cuerpo, florecido y floreciente,
y otras veces montado en una danta
donde sin taparrabos cabalga la leyenda.

América es así:
¡Naturaleza!
No con rostro de nieve, sí de piedra,
no con voz de jilguero, sí de trueno,
no con sexo de mula como quieren
los que su savia maternal pretenden detener.
No con húmedo cuerpo de paloma
y sí con trepidente
arquitectura feroz y femenina de pantera.
No con luz de luciérnaga en los ojos
sino con mil relámpagos de estrellas.
América extendida para entrega
que ha de fructificar en raza nueva.
Pero América erguida
con un lucero al norte de su rumbo
en vez de aquella mano levantada
como de libertad enmascarada
que si no se calcina se congela.
América con niños que sean niños,
sin aquel santa claus de los que tienen
todavía prohibida la emoción de la flecha,
la angustia del tambor,
el placer del torrente,
porque son colibríes encerrados
en bonita hosca jaula de quimeras.

Pero mi bella América desnuda
que fue vírgen y novia, angelical y tierna,
que es la de quetzacoalt ala del mito
está en el gran día de esta era
amanecida ya en mujer,
su himen se le ha vuelto torrentera
desde Cauthemoc,
Desde Paramaconi,
desde Tupac Amaru,
desde Caupolicán el Araucano,
desde el negro Miguel,
desde Chirinos,
desde Hidalgo y Morelos,
San Martín y Bolívar,
Miranda, Sucre, Girardot, Martí,
y todos ellos…

Y desde el gran Sandino
que ayer dobló su tallo para soltar semillas.
y desde aquel Camilo colombiano
con que Cristo se vino hasta mi Tierra.
desde el Che de la Pampa
que fue a la Sierra Maestra
para volver de allá a hacerse símbolo
cerca de donde estuvo Tiahuanaco.
Y de los que como ellos
la han preñado de veras
porque aquí está el futuro:
el Adán de esta Eva.
Hoy me siento como ellos los varones
como ustedes se sienten,
porque somos los hombres
los mestizos
los que nacimos del encuentro
de la cruz, del tambor y la flecha.

Yo imagino la América desnuda.
¡Que bella es
y que tierna
y cómo le palpita el corazón,
aunque con oro se lo quieran petrificar
los que no la comprenden!
Hace falta más fuerza,
más vigor,
más sudor
y más sangre
¡Para que para América!

jairo aníbal niño / habla de todo un poco...

Policrítica en la hora de los chacales

De qué sirve escribir la buena prosa,
De qué vale que exponga razones y argumentos
Si los chacales velan, la manada se tira contra el verbo,
Lo mutilan, le sacan lo que quieren, dejan de lado el resto,
Vuelven lo blanco negro, el signo más se cambia en signo menos,
Los chacales son sabios en los télex,
Son las tijeras de la infamia y del malentendido,
Manada universal, blancos, negros, albinos,
Lacayos si no firman y todavía más chacales cuando firman,
De qué sirve escribir midiendo cada frase,
De qué sirve pesar cada acción, cada gesto que expliquen la
Conducta
Si al otro día los periódicos, los consejeros, las agencias,
Los policías disfrazados,
Los asesores del gorila, los abogados de los trusts
Se encargarán de la versión más adecuada para consumo de
inocentes o de crápulas,
fabricarán una vez más la mentira que corre, la duda que se
instala,
y tanta buena gente en tanto pueblo y tanto campo de tanta
tierra nuestra
que abre su diario y busca su verdad y se encuentra
con la mentira maquillada, los bocados a punto, y va tragando
baba prefabricada, mierda en pulcras columnas, y hay quien
cree
y hay quien olvida el resto, tantos años de amor y de combate,
porque así es, compadre, los chacales lo saben: la memoria es
falible
y como en los contratos, como en los testamentos, el diario de
hoy con sus noticias invalida
todo lo precedente, hunde el pasado en la basura de un presente
traficado y mentido.


Entonces no, mejor ser lo que se es,
Decir eso que quema la lengua y el estómago, siempre habrá
Quien entienda
Este lenguaje que del fondo viene
Como del fondo brotan el semen, la leche, las espigas.
Y el que espera otra cosa, la defensa o la fina explicación,
la reincidencia o el escape, nada más fácil que comprar el diario
Made in USA
Y leer los comentarios a este texto, las versiones de Reuter o
De la UPI
Donde los chacales sabihondos le darán la versión satisfactoria,
Donde editorialistas mexicanos o brasileños o argentinos
Traducirán para él, con tanta generosidad,
Las instrucciones del chacal con sede en Washintong,
Las pondrán en correcto castellano, mezcladas con saliva
nacional
Con mierda autóctona, fácil de tragar.

No me excuso de nada, y sobre todo
No excuso este lenguaje,
Es la hora del Chacal, de los chacales y de sus obedientes:
Los mando a todos a la reputa madre que los parió,
Y digo lo que vivo y lo que siento y lo que sufro y lo que
Espero.

Diariamente, en mi mesa, los recortes de prensa: París,
Londres,
Nueva York, Buenos Aires, México City, Río. Diariamente
(en poco tiempo, apenas dos semanas) la máquina montada,
la operación cumplida, los liberales encantados, los
revolucionarios confundidos,
la violación con letra impresa, los comentarios compungidos,
alianza de chacales y de puros, la manada feliz, todo va bien.

Me cuesta emplear esta primera persona del singular, y más me
Cuesta
Decir: esto es así, o esto es mentira. Todo escritor, Narciso,se
Masturba
Defendiendo su nombre, el Occidente
Lo ha llenado de orgullo solitario. ¿Quién soy yo
Frente a los pueblos que luchan por la sal y la vida,
Con qué derecho he de llenar más páginas con negociaciones y
Opiniones personales?

Si hablo de mí es que acaso, compañero,
Allí donde te encuentran estas líneas,
Me ayudarás, te ayudaré a matar a los chacales,
veremos más preciso el horizonte, más verde el mar y más
Seguro el hombre.

Les hablo a todos mis hermanos, pero miro hacia Cuba,
No sé de otra manera mejor para abarcar la América Latina.
Comprendo a Cuba como sólo se comprende al ser amado,
los gestos, las distancias y tantas diferencias,
las cóleras, los gritos: por encima está el sol, la libertad.

Y todo empieza por lo opuesto, por un poeta encarcelado,
Por la necesidad de comprender por qué, de preguntar y de
Esperar,
Qué sabemos aquí de lo qué pasa, tantos que somos Cuba,
Tantos que diariamente resistimos el aluvión y el vómito
De las buenas conciencias,
De los desencantados, de los que ven cambiar ese modelo
Que imaginaron por su cuenta y en sus casas, para dormir
Tranquilos

Sin hacer nada, sin mirar de cerca, la luna de miel barata con su isla
Paraíso
Lo bastante lejana para ser de verdad paraíso
Y que de golpe encuentran en su cielito lindo les cae en la
Cabeza.

Tienes razón Fidel: sólo en la brega hay derecho al
Descontento,
Sólo de adentro ha de salir la crítica, la búsqueda de fórmulas
Mejores,
Sí, pero de adentro es tan afuera a veces,
Y si hoy me aparto para siempre del liberal a la violeta, de los
que firman los virtuosos textos
por-que-Cu-ba-no-es-eso-que-e-xi-gen-sus-es-que-mas-de-bu-fe-te,
no me creo excepción, soy como ellos, qué habré hecho por
Cuba más allá del amor,
Qué habré dado por Cuba más allá de un deseo, una esperanza.

Pero me aparto ahora de su mundo ideal, de sus esquemas,
Precisamente ahora cuando
Se me pone en la puerta de lo que amo, se me prohibe
Defenderlo,
Es ahora que ejerzo mi derecho a elegir, a estar una vez más y
Más que nunca
Con tu Revolución, mi Cuba, a mi manera. Y mi manera torpe,
A manotazos,
Es ésta, es repetir lo que me gusta o no me gusta,
Aceptando el reproche de hablar desde tan lejos
Y a la vez insistiendo (cuántas veces lo habré hecho para el
Viento)
En que soy lo que soy, y no soy nada, y esa nada es mi tierra
Americana,
Y como pueda y donde este signo siendo tierra, y por sus
Hombres
Escribo cada letra de mis libros y vivo cada día de mi vida.

Comentario de los chacales (vía México, reproducida con alborozo en Río de Janeiro y Buenos Aires): "El ahora francés Julio Cortázar… etc." De nuevo el patrioterismo de escarapela, cómodo y rendidor, de nuevo la baba de los resentidos, de tantos que se quedan en sus pozos sin hacer nada, sin ser oídos más que en sus casas a la hora del bife; como si en algo dejara yo de ser latinoamericano, como si un cambio a nivel de pasaporte (y ni siquiera lo es, pero no vamos a poner a explicar, al chacal se lo patea y se acabó) mi corazón fuera a cambiar, mi conducta fuera a cambiar, mi camino fuera a cambiar. Demasiado asco para seguir con esto; mi patria es otra cosa, nacionalista infeliz; me sueno los mocos con tu bandera de pacotilla, ahí donde estés. La revolución también es otra cosa; a su término, muy lejos, tal vez infinitamente lejos, hay una magnífica quema de banderas, una fogata de trapos manchados por todas las mentiras y la sangre de la historia de los chacales y los resentidos y los mediocres y los burócratas y los gorilas y los lacayos.


Y así es, compañeros, si me oyen en La Habana, en cualquier
parte,
hay cosas que no trago,
hay cosas que no puedo tragar en una marcha hacia la luz,
nadie llega a la luz si saca a relucir los podridos fantasmas del pasado,
si los perjuicios, los tabúes del macho y de la hembra
siguen en sus maletas,
y si un vocabulario de casuistas cuando no de energúmenos
arma la burocracia del idioma y los cerebros, condiciona a los
pueblos
que Marx y que Lenin soñaron libres por dentro y por fuera,
en carne y en conciencia y en amor,
en alegría y trabajo.

Por eso, compañeros, sé que puedo decirles
Lo que creo y no creo, lo que acepto y no acepto,
Esta mi policrítica, mi herramienta de luz,
Y en Cuba sé de ese combate contra tanto enemigo,
Sé de esa isla de hombres enteros que nunca olvidarán la risa y
La ternura,
Que las defenderán enamoradamente,
Que cantan y que beben entre turnos de brega, que hacen
Guardia fumando,
Que son los que buscó Martí, lo que firmaron con su sangre
Tantos muertos
A la hora de caer frente a chacales de dentro y a chacales de
Fuera.

No seré yo quien proclame al divino botón el coraje de Cuba y
Su combate;
Siempre hay alguna hiena maquinada de juez, poeta o crítico,
Lista a cantar las loas de lo que odia en el fondo de sus tripas,
Pronta a asfixiar la voz de los que quieren el verdadero diálogo,
El contacto
Por lo alto y por lo bajo: contacto con ese hombre que manda
En el peligro porque el pueblo
Cuenta con él y sabe
Que está ahí porque es justo, porque en él se define
La razón de la lucha, del duro derrotero,
Porque jugo su vida con Camilo y el Che y tantos que pueblan
De huesos y memorias la tierra de la palma;
Y también en contacto Con el otro, el sencillo camarada que necesita la palabra y el rumbo
Para impulsar mejor la máquina, para cortar mejor la caña.

Nadie espere de mí el elogio fácil,
Pero hoy es más que nunca tiempo de decisión y de aguas
Claras:
Diálogo pido, encuentro en las borrascas, policríticas diaria,
No acepto la repetición de humillaciones torpes,
No acepto risas de los fariseos convencidos de que todo anda
Bien después de cada ejemplo,
No acepto la intimidación ni la vergüenza. Y es por eso que
Acepto
La crítica de veras, la que viene de aquel que aguanta en el
timón,
de aquellos que pelean por una causa justa, allá o aquí, en lo
alto o en lo bajo,
y reconozco la torpeza de pretender saberlo todo desde un mero
escritorio
y busco humildemente la verdad en los hechos de ayer y de
mañana,
y te busco la cara, Cuba la muy querida, y soy el que fue a ti
como se va a beber el agua, con la sed que será racimo o canto.
Revolución hecha de hombres,
Llena estarás de errores y desvíos, llena estarás de lágrimas y
Ausencias,
Pero a mí, a los que tantos en horizontes somos pedazos de
América Latina,
Tú nos comprenderás al término del día,
Volveremos a vernos, a estar juntos, carajo,
Contra hienas y cerdos y chacales de cualquier meridiano,
Contra tibios y flojos y escribas y lacayos
En París, en La Habana o Buenos Aires,
Contra lo peor que duerme en lo mejor, contra el peligro
De quedarse atascado en plena ruta, de no cortar los nudos
Machetazo limpio,
Así yo sé que un día volveremos a vernos,
Buenos días, Fidel, buenos días, Haydée, buenos días mi Casa,
Mi sitio en los amigos y en las calles, mi buchito, mi amor,
Mi caimancito herido y más vivo que nunca,
Yo soy esta palabra mano a mano como otros son tus ojos o tus
Músculos,
Todos juntos iremos a la zafra futura,
Al azúcar de un tiempo sin imperios ni esclavos.

Hablémonos, eso es de hombres: al comienzo
fue el diálogo. Déjame defenderte
cuando asome el chacal de turno, déjame estar ahí. Y si no lo
quieres,
oye, compadre, olvida tanta crisis barata. Empecemos de nuevo,
di lo tuyo, aquí estoy, aquí te espero; toma, fuma conmigo,
largo es el día, el humo ahuyenta los mosquitos. Sabes,
nunca estuve tan cerca
como ahora, de lejos, contra viento y marea. El día nace.



Publicado en la revista Casa de las Américas, n º 67, julio-agosto de 1971, La Habana

 
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