"Corazón obscuro,
corazón con muros,
corazón que se esconde,
corazón que está dónde,
corazón en fuga,
herido de dudas
de amor. "
corazón con muros,
corazón que se esconde,
corazón que está dónde,
corazón en fuga,
herido de dudas
de amor. "
silvio rodríguez
NOTA: Por favor, da clic dentro de este paréntesis (_)
Lo ves ahí, esperando. En este momento lo encuentro así. Confieso que se me escapa una sonrisa, que curioso, siempre delante de mis ojos y por primera vez desentraño su realidad, su magnitud. Podría decirse que parpadea o que titila, para los nuestros registros me resulta más poético afirmar que palpita insaciable en pos de una letra, un número, un espacio, algún carácter que aplaque por una fracción de segundo su hambre eterna. Hay quien lo llaman “cursor” pero aquel nombre me resulta frío, sin alma; yo preferiría llamarlo mago, taumaturgo o alquimista pues como tal lo he descubierto hoy.
Pensar que estaba ahí al principio de todo, que su conjuro intermitente nos seduciría hacia las primeras palabras, pensar que aquella línea insignificante daría a luz casualidades y confidencias, pensar que se alimentaría tantas veces de puntos suspensivos, que se convertiría en culpable y cómplice, pensar que ahora mismo me sigue letra a letra, late frente a mi como si fuera el corazón que bombea estas palabras por las venas traslúcidas del papel.
Hoy como siempre me es grata su compañía (de hecho qué mejor amigo podría tener un mal boceto de escritor como yo) solo que ahora se matiza de forma inusual, hoy su pestañeo incesante trae consigo nuevas implicaciones: mientras que yo intento blandir mis emociones a dos manos él me exhorta al arte, mientras que yo optaría por el sano oficio epistolar él apacigua mi ímpetu convenciéndome en revindicar el discurso, mientras que los sin sabores casi gotean por mis dedos él me susurra un consejo de hermano que intentaré poner en práctica: dejar mis sentimientos a un lado, a lo sumo como un mensaje subliminal, como una música de fondo para acompañar las letras que hablen de nuestra historia, de todo aquello que vivimos. Porque aunque: “...nuestro amor fue desde siempre un niño muerto y solo de a ratos parecía que iba a vivir, que iba a vencernos” no es justo que permanezca como tal en la memoria. Esta historia tuya y mía es fruto de nuestro amor, es carne de nuestra carne, letra de nuestras letras, eco de nuestras voces, esta historia es nuestra hija que ha de vivir bella y radiante en nuestras almas coqueteando de vez en cuando con el lado mas iluso de nuestro corazón.
“El amor cuando no muere, mata...
amores que matan nunca mueren... ”
Joaquín Sabina
“Brindemos por el amor y sus fracasos, quizás podamos escoger nuestra derrota, el sol limpia las calles, la memoria, feroces pasiones atenúa. Invéntate el final de cada historia que el amor es eterno mientras dura”
Ismael Serrano
Quien iba a prever que el amor ese informal se dedicara a ellos tan formales, mientras se escribían por primera vez, él muy lento y ella no tanto y llenaban con sospechosa objetividad el messenger con grandes temas en dos volúmenes, su sonrisa, la de ella era como un augurio o una fábula, su mirada, la de él imaginaba cómo eran sus ojos, los de ella, pero sus palabras, las de él no se enteraban de esa dulce encuesta.
Como siempre o como casi siempre la política condujo a la cultura, y Cuba a la revolución, y la revolución a Silvio, y Silvio a la poesía, y la poesía a Benedetti con un poema no apto para corazones heridos de dudas de amor, y así antes de empezar a escribir en círculos, él se dio cuenta que en realidad no sabían mucho de el uno del otro; entonces sentados allí a la tibia luz de los monitores ellos optaron por la confidencia extra seca y sin hielo por favor.
Seis días de cartas, fotos y poemas, que hoy constituyen 2.61 megabites en el baúl de sus respectivos nombres...
Seis días de largas horas al teléfono pese a lo implacables que son las tarifas de la empresa privada aunque se trate del amor...
Seis días de cachimalas, cangrejos, colores favoritos, cucharaditas de tierra, guitarra por teléfono, puestas de alarma, consultas psicológicas, hasta mañanas sin ropa, bailes con islandesas, miradas coquetas, llamadas en espera, celos infundados, intercambio de acentos, cafés que destruyen hígados, cigarrillos que complican fracturas, caracteres de chapa, teléfonos descargados, deberes de matemática, timbres de artificio, trasconejamientos y quijuemadres...
Seis días de:
...contaste tres
...contaste dos
Hace siete segundos que Dios bailaba en nuestros dedos
libre de atavíos, de vestiduras sacramentales.
3
2...
y los segundos se quedaron colgados en un monitor...
hoy aquel extranjero con sabor a dolor y mirada fugaz no ha querido visitarme haciéndome olvidar por un segundo, por un respiro que nada ocurre en mi océano, que las olas están en calma y que mi vida podrá observar un nuevo amanecer...
...traslúcida imagen, llegas
disparando tu luz tan a quemarropa
¿acaso no sabes el peligro que corres?
¿desconoces el riesgo de liberar estas letras?
Andaban correteando mis ideas por algún lugar lejano de mi alma...
Ahí entre la aorta y el nervio óptico...
Entre el universo de neuronas y el sistema límbico...
Entre la pelea constante del hemisferio derecho con el izquierdo...
Por aquello de que “yo quiero ser a la zurda más que diestro”...
Soñaba hoy con la aventura de descubrir nuevas tierras
acaso te lo decía; pero mal compromiso aquel que no se escribe.
Divagaba hoy en medio de la nocturnidad con viajes de ambrosías.
Se me pasa la vida –distante y coqueta –
Entre mil unicornios e ideales perdidos...
Caerían en dos hojas,
distintas y paralelas,
simultáneas y antagónicas
las palabras que ahora se derriten
gota a gota entre mis dedos...
Quisiera cambiarte la vida en un segundo
Y regalarte los días más hermosos que te pueda dar el cielo...
...hoy la luz fue esquiva, y eso únicamente como antecedente.
Te vi y tu aire huele a mar...a ciudad lejana y absorbida por la lluvia y el smock...
Mientras en tu espacio, la brisa llena aquel corazón de soledades y perdones...
Ahí estás....con ganas de lanzar puntos suspensivos que viajen kilómetros para encontrar por fin mis labios...y quizá mi cuerpo, y quizá mi vida...
A veces quisiera dejarte una nota,
tener un papel ínfimo
que diga apenas lo esencial...
Eres mi amor por todos lados...
De la cabeza a los pies
Principio y fin
Hombre sin treguas
En este lado de mi vida
Y al otro lado de mis sueños,
Todavía te alcanzo...todavía...
Una puerta,
una ventana,
una página en blanco,
casi cualquier pretexto es válido si de pronto alzas tu mirada
y me ves esbozado en tu futuro...
Seis días que fueron como seis siglos, seis días que les habían robado más de un te amo, seis días que cayeron por su propio peso cuando ya se veían planificando su encuentro... pero a veces el amor está lleno de percances y en este caso en particular la rutina era implacable con ellos. Los dos con sus horarios y responsabilidades: ella dirigiendo proyectos educativos y él como redactor en un suplemento dominical, ella cantando trova en los bares y él metido en estudios de grabación... pero no todo estaba en contra, tenían una ventaja, un as bajo la manga que a la final hacia todo mas fácil: la ciudad.
Su ciudad que no era grande ni chica, donde había cien centros comerciales pero toda carrera costaba un dólar, que tenia un mar donde nadaban peces colmados de melancolía y un volcán atorado de cenizas; donde había peligros como: botellas cayendo del cielo o restaurantes donde robaban carteras. Su ciudad que tenia un trole, una catedral, insectos que soportaban el frío, discos a treinta y cinco centavos, pan caliente a las seis de la tarde y una central de radio taxis llamada “Enemigo”.
Esperaron pacientes el séptimo día, donde el azar confluyó en un feriado nacional que les brindo su anhelado momento, se celebraba el día de “San Hijuemadre” patrono de los ateos; sin mucha planificación decidieron encontrarse a las siete de la noche en un lugar denominado La mosca, que quedaba el norte de la avenida que iba al sur, justo frente a dos escaleras hacia la nada.
Y ahí estuvieron, el uno frente al otro...
Se saludaron con beso en la mejilla y caminaron sin tocarse una uña o un ojal ni siquiera una hebilla o una manga y como hacia bastante frío y ella no usaba su bufanda multicolor fue preciso meterse en un café.
Al salir notaron que la noche era joven y que además venia vestida de luna llena, así que decidieron tomarla por asalto... con mucha compostura empezaron yendo a ver una película sobre viajes en motocicleta, rodaron lágrimas y se llenaron de argumentos, luego y talvez por la adrenalina en aumento terminaron bailando pegaditos los acordes de Rosana en el primer refugio insomne que encontraron.
Se hacia tarde, cuando llegaron a su casa, la de ella (que por cierto estaba adornada de cajas pues se acababa de mudar) ya el frío estaba en sus labios, los de él, de modo que ella, fábula y augurio, le dio refugio y café instantáneos. Una hora apenas de biografía y nostalgias hasta que al fin sobrevino un silencio, como se sabe en estos casos es bravo decir algo que realmente no sobre... él probo: “solo falta que me quede a dormir” y ella probo: “por que no te quedas” y él: “no me lo digas dos veces” y ella: “bueno porque no te quedas”.
De manera que él se quedo en principio a besar sin usura sus pies fríos, los de ella, después ella besó sus labios, los de él, que a esa altura ya no estaban tan fríos y sucesivamente así...
...mientras los grandes temas, las computadoras, Silvio, los teléfonos, la ciudad y Benedetti dormían el sueño que ellos no durmieron.
Guárdame en papel
atesórame en tinta
que cuando en tu corazón halles los huesos míos
solo estas páginas existan.
Feliz punto final....
FAREWELL
1
DESDE EL FONDO DE TI, Y ARRODILLADO,
UN NIÑO TRISTE, COMO YO, NOS MIRA.
POR ESA VIDA QUE ARDERÁ EN SUS VENAS
TENDRÍAN QUE AMARRARSE NUESTRAS VIDAS.
POR ESAS MANOS, HIJAS DE TUS MANOS,
TENDRÍAN QUE MATAR LAS MANOS MÍAS.
POR SUS OJOS ABIERTOS EN LA TIERRA
VERÉ EN LOS TUYOS LÁGRIMAS UN DÍA.
2
YO NO LO QUIERO, AMADA.
PARA QUE NADA NOS AMARRE
QUE NO NOS UNA NADA.
NI LA PALABRA QUE AROMÓ TU BOCA,
NI LO QUE NO DIJERON LAS PALABRAS.
NI LA FIESTA DE AMOR QUE NO TUVIMOS,
NI TUS SOLLOZOS JUNTO A LA VENTANA.
3
(AMO EL AMOR DE LOS MARINEROS
QUE BESAN Y SE VAN.
DEJAN UNA PROMESA.
NO VUELVEN NUNCA MÁS.
EN CADA PUERTO UNA MUJER ESPERA:
LOS MARINEROS BESAN Y SE VAN.
UNA NOCHE SE ACUESTAN CON LA MUERTE
EN EL LECHO DEL MAR.
4
AMO EL AMOR QUE SE REPARTE
EN BESOS, LECHO Y PAN.
AMOR QUE PUEDE SER ETERNO
Y PUEDE SER FUGAZ.
AMOR QUE QUIERE LIBERTARSE
PARA VOLVER A AMAR.
AMOR DIVINIZADO QUE SE ACERCA
AMOR DIVINIZADO QUE SE VA.)
5
YA NO SE ENCANTARÁN MIS OJOS EN TUS OJOS,
YA NO SE ENDULZARÁ JUNTO A TI MI DOLOR.
PERO HACIA DONDE VAYA LLEVARÉ TU MIRADA
Y HACIA DONDE CAMINES LLEVARÁS MI DOLOR.
FUI TUYO, FUISTE MÍA. QUÉ MÁS? JUNTOS HICIMOS
UN RECODO EN LA RUTA DONDE EL AMOR PASÓ.
FUI TUYO, FUISTE MÍA. TU SERÁS DEL QUE TE AME,
DEL QUE CORTE EN TU HUERTO LO QUE HE SEMBRADO YO.
YO ME VOY. ESTOY TRISTE: PERO SIEMPRE ESTOY TRISTE.
VENGO DESDE TUS BRAZOS. NO SÉ HACIA DÓNDE VOY.
...DESDE TU CORAZÓN ME DICE ADIÓS UN NIÑO.
Y YO LE DIGO ADIÓS.
Lo ves ahí, esperando. En este momento lo encuentro así. Confieso que se me escapa una sonrisa, que curioso, siempre delante de mis ojos y por primera vez desentraño su realidad, su magnitud. Podría decirse que parpadea o que titila, para los nuestros registros me resulta más poético afirmar que palpita insaciable en pos de una letra, un número, un espacio, algún carácter que aplaque por una fracción de segundo su hambre eterna. Hay quien lo llaman “cursor” pero aquel nombre me resulta frío, sin alma; yo preferiría llamarlo mago, taumaturgo o alquimista pues como tal lo he descubierto hoy.
Pensar que estaba ahí al principio de todo, que su conjuro intermitente nos seduciría hacia las primeras palabras, pensar que aquella línea insignificante daría a luz casualidades y confidencias, pensar que se alimentaría tantas veces de puntos suspensivos, que se convertiría en culpable y cómplice, pensar que ahora mismo me sigue letra a letra, late frente a mi como si fuera el corazón que bombea estas palabras por las venas traslúcidas del papel.
Hoy como siempre me es grata su compañía (de hecho qué mejor amigo podría tener un mal boceto de escritor como yo) solo que ahora se matiza de forma inusual, hoy su pestañeo incesante trae consigo nuevas implicaciones: mientras que yo intento blandir mis emociones a dos manos él me exhorta al arte, mientras que yo optaría por el sano oficio epistolar él apacigua mi ímpetu convenciéndome en revindicar el discurso, mientras que los sin sabores casi gotean por mis dedos él me susurra un consejo de hermano que intentaré poner en práctica: dejar mis sentimientos a un lado, a lo sumo como un mensaje subliminal, como una música de fondo para acompañar las letras que hablen de nuestra historia, de todo aquello que vivimos. Porque aunque: “...nuestro amor fue desde siempre un niño muerto y solo de a ratos parecía que iba a vivir, que iba a vencernos” no es justo que permanezca como tal en la memoria. Esta historia tuya y mía es fruto de nuestro amor, es carne de nuestra carne, letra de nuestras letras, eco de nuestras voces, esta historia es nuestra hija que ha de vivir bella y radiante en nuestras almas coqueteando de vez en cuando con el lado mas iluso de nuestro corazón.
“El amor cuando no muere, mata...
amores que matan nunca mueren... ”
Joaquín Sabina
“Brindemos por el amor y sus fracasos, quizás podamos escoger nuestra derrota, el sol limpia las calles, la memoria, feroces pasiones atenúa. Invéntate el final de cada historia que el amor es eterno mientras dura”
Ismael Serrano
Quien iba a prever que el amor ese informal se dedicara a ellos tan formales, mientras se escribían por primera vez, él muy lento y ella no tanto y llenaban con sospechosa objetividad el messenger con grandes temas en dos volúmenes, su sonrisa, la de ella era como un augurio o una fábula, su mirada, la de él imaginaba cómo eran sus ojos, los de ella, pero sus palabras, las de él no se enteraban de esa dulce encuesta.
Como siempre o como casi siempre la política condujo a la cultura, y Cuba a la revolución, y la revolución a Silvio, y Silvio a la poesía, y la poesía a Benedetti con un poema no apto para corazones heridos de dudas de amor, y así antes de empezar a escribir en círculos, él se dio cuenta que en realidad no sabían mucho de el uno del otro; entonces sentados allí a la tibia luz de los monitores ellos optaron por la confidencia extra seca y sin hielo por favor.
Seis días de cartas, fotos y poemas, que hoy constituyen 2.61 megabites en el baúl de sus respectivos nombres...
Seis días de largas horas al teléfono pese a lo implacables que son las tarifas de la empresa privada aunque se trate del amor...
Seis días de cachimalas, cangrejos, colores favoritos, cucharaditas de tierra, guitarra por teléfono, puestas de alarma, consultas psicológicas, hasta mañanas sin ropa, bailes con islandesas, miradas coquetas, llamadas en espera, celos infundados, intercambio de acentos, cafés que destruyen hígados, cigarrillos que complican fracturas, caracteres de chapa, teléfonos descargados, deberes de matemática, timbres de artificio, trasconejamientos y quijuemadres...
Seis días de:
...contaste tres
...contaste dos
Hace siete segundos que Dios bailaba en nuestros dedos
libre de atavíos, de vestiduras sacramentales.
3
2...
y los segundos se quedaron colgados en un monitor...
hoy aquel extranjero con sabor a dolor y mirada fugaz no ha querido visitarme haciéndome olvidar por un segundo, por un respiro que nada ocurre en mi océano, que las olas están en calma y que mi vida podrá observar un nuevo amanecer...
...traslúcida imagen, llegas
disparando tu luz tan a quemarropa
¿acaso no sabes el peligro que corres?
¿desconoces el riesgo de liberar estas letras?
Andaban correteando mis ideas por algún lugar lejano de mi alma...
Ahí entre la aorta y el nervio óptico...
Entre el universo de neuronas y el sistema límbico...
Entre la pelea constante del hemisferio derecho con el izquierdo...
Por aquello de que “yo quiero ser a la zurda más que diestro”...
Soñaba hoy con la aventura de descubrir nuevas tierras
acaso te lo decía; pero mal compromiso aquel que no se escribe.
Divagaba hoy en medio de la nocturnidad con viajes de ambrosías.
Se me pasa la vida –distante y coqueta –
Entre mil unicornios e ideales perdidos...
Caerían en dos hojas,
distintas y paralelas,
simultáneas y antagónicas
las palabras que ahora se derriten
gota a gota entre mis dedos...
Quisiera cambiarte la vida en un segundo
Y regalarte los días más hermosos que te pueda dar el cielo...
...hoy la luz fue esquiva, y eso únicamente como antecedente.
Te vi y tu aire huele a mar...a ciudad lejana y absorbida por la lluvia y el smock...
Mientras en tu espacio, la brisa llena aquel corazón de soledades y perdones...
Ahí estás....con ganas de lanzar puntos suspensivos que viajen kilómetros para encontrar por fin mis labios...y quizá mi cuerpo, y quizá mi vida...
A veces quisiera dejarte una nota,
tener un papel ínfimo
que diga apenas lo esencial...
Eres mi amor por todos lados...
De la cabeza a los pies
Principio y fin
Hombre sin treguas
En este lado de mi vida
Y al otro lado de mis sueños,
Todavía te alcanzo...todavía...
Una puerta,
una ventana,
una página en blanco,
casi cualquier pretexto es válido si de pronto alzas tu mirada
y me ves esbozado en tu futuro...
Seis días que fueron como seis siglos, seis días que les habían robado más de un te amo, seis días que cayeron por su propio peso cuando ya se veían planificando su encuentro... pero a veces el amor está lleno de percances y en este caso en particular la rutina era implacable con ellos. Los dos con sus horarios y responsabilidades: ella dirigiendo proyectos educativos y él como redactor en un suplemento dominical, ella cantando trova en los bares y él metido en estudios de grabación... pero no todo estaba en contra, tenían una ventaja, un as bajo la manga que a la final hacia todo mas fácil: la ciudad.
Su ciudad que no era grande ni chica, donde había cien centros comerciales pero toda carrera costaba un dólar, que tenia un mar donde nadaban peces colmados de melancolía y un volcán atorado de cenizas; donde había peligros como: botellas cayendo del cielo o restaurantes donde robaban carteras. Su ciudad que tenia un trole, una catedral, insectos que soportaban el frío, discos a treinta y cinco centavos, pan caliente a las seis de la tarde y una central de radio taxis llamada “Enemigo”.
Esperaron pacientes el séptimo día, donde el azar confluyó en un feriado nacional que les brindo su anhelado momento, se celebraba el día de “San Hijuemadre” patrono de los ateos; sin mucha planificación decidieron encontrarse a las siete de la noche en un lugar denominado La mosca, que quedaba el norte de la avenida que iba al sur, justo frente a dos escaleras hacia la nada.
Y ahí estuvieron, el uno frente al otro...
Se saludaron con beso en la mejilla y caminaron sin tocarse una uña o un ojal ni siquiera una hebilla o una manga y como hacia bastante frío y ella no usaba su bufanda multicolor fue preciso meterse en un café.
Al salir notaron que la noche era joven y que además venia vestida de luna llena, así que decidieron tomarla por asalto... con mucha compostura empezaron yendo a ver una película sobre viajes en motocicleta, rodaron lágrimas y se llenaron de argumentos, luego y talvez por la adrenalina en aumento terminaron bailando pegaditos los acordes de Rosana en el primer refugio insomne que encontraron.
Se hacia tarde, cuando llegaron a su casa, la de ella (que por cierto estaba adornada de cajas pues se acababa de mudar) ya el frío estaba en sus labios, los de él, de modo que ella, fábula y augurio, le dio refugio y café instantáneos. Una hora apenas de biografía y nostalgias hasta que al fin sobrevino un silencio, como se sabe en estos casos es bravo decir algo que realmente no sobre... él probo: “solo falta que me quede a dormir” y ella probo: “por que no te quedas” y él: “no me lo digas dos veces” y ella: “bueno porque no te quedas”.
De manera que él se quedo en principio a besar sin usura sus pies fríos, los de ella, después ella besó sus labios, los de él, que a esa altura ya no estaban tan fríos y sucesivamente así...
...mientras los grandes temas, las computadoras, Silvio, los teléfonos, la ciudad y Benedetti dormían el sueño que ellos no durmieron.
Guárdame en papel
atesórame en tinta
que cuando en tu corazón halles los huesos míos
solo estas páginas existan.
Feliz punto final....
FAREWELL
1
DESDE EL FONDO DE TI, Y ARRODILLADO,
UN NIÑO TRISTE, COMO YO, NOS MIRA.
POR ESA VIDA QUE ARDERÁ EN SUS VENAS
TENDRÍAN QUE AMARRARSE NUESTRAS VIDAS.
POR ESAS MANOS, HIJAS DE TUS MANOS,
TENDRÍAN QUE MATAR LAS MANOS MÍAS.
POR SUS OJOS ABIERTOS EN LA TIERRA
VERÉ EN LOS TUYOS LÁGRIMAS UN DÍA.
2
YO NO LO QUIERO, AMADA.
PARA QUE NADA NOS AMARRE
QUE NO NOS UNA NADA.
NI LA PALABRA QUE AROMÓ TU BOCA,
NI LO QUE NO DIJERON LAS PALABRAS.
NI LA FIESTA DE AMOR QUE NO TUVIMOS,
NI TUS SOLLOZOS JUNTO A LA VENTANA.
3
(AMO EL AMOR DE LOS MARINEROS
QUE BESAN Y SE VAN.
DEJAN UNA PROMESA.
NO VUELVEN NUNCA MÁS.
EN CADA PUERTO UNA MUJER ESPERA:
LOS MARINEROS BESAN Y SE VAN.
UNA NOCHE SE ACUESTAN CON LA MUERTE
EN EL LECHO DEL MAR.
4
AMO EL AMOR QUE SE REPARTE
EN BESOS, LECHO Y PAN.
AMOR QUE PUEDE SER ETERNO
Y PUEDE SER FUGAZ.
AMOR QUE QUIERE LIBERTARSE
PARA VOLVER A AMAR.
AMOR DIVINIZADO QUE SE ACERCA
AMOR DIVINIZADO QUE SE VA.)
5
YA NO SE ENCANTARÁN MIS OJOS EN TUS OJOS,
YA NO SE ENDULZARÁ JUNTO A TI MI DOLOR.
PERO HACIA DONDE VAYA LLEVARÉ TU MIRADA
Y HACIA DONDE CAMINES LLEVARÁS MI DOLOR.
FUI TUYO, FUISTE MÍA. QUÉ MÁS? JUNTOS HICIMOS
UN RECODO EN LA RUTA DONDE EL AMOR PASÓ.
FUI TUYO, FUISTE MÍA. TU SERÁS DEL QUE TE AME,
DEL QUE CORTE EN TU HUERTO LO QUE HE SEMBRADO YO.
YO ME VOY. ESTOY TRISTE: PERO SIEMPRE ESTOY TRISTE.
VENGO DESDE TUS BRAZOS. NO SÉ HACIA DÓNDE VOY.
...DESDE TU CORAZÓN ME DICE ADIÓS UN NIÑO.
Y YO LE DIGO ADIÓS.
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